El salado es una especie endémica de la región Macaronésica. Es un arbusto propio de las regiones costeras de todas las islas, de hasta 1 m de altura. La planta se ramifica profusamente desde la base, donde es leñosa y presenta tallos de color marrón claro con tonos grises. Los tallos herbáceos, de color gris blanquecino, son muy frágiles. Hojas lineares, algo carnosas, de color gris pálido y sección circular. El color gris blanquecino es debido a la gran densidad de pelos cortos en la superficie, y es una estrategia que presenta la planta para evitar daños por exceso de insolación y calor. Sus flores son amarillas, muy pequeñas y en forma de tubo, que se agrupan en inflorescencias a modo de capítulo, que a su vez se agrupan en sinflorescencias en el extremo apical de las ramas.