Arbusto endémico de la región Macaronésica que puede llegar a alcanzar los 5 m de altura. Su tronco está lleno de nudos y es muy quebradizo. Las hojas alternas y simples, grandes, de color verde oscuro y gran variación morfológica, de ovadas a ovado-elípticas o lanceoladas de base atenuada. Normalmente caen en época estival aunque algunos ejemplares en buenas condiciones no realizan esta parada. Flores de color verde-amarillento, con cinco piezas en el cáliz y la corola, y se encuentran agrupadas en racimos. Su fruto es una baya que recuerda a un tomate de pequeñas dimensiones, y se encuentra parcialmente encerrado en un cáliz acrescente, que permanece en la fructificación y se desarrolla hasta generar una envuelta en forma de campana con cinco largos apéndices.