Los Quijotes en el Fondo Antiguo de la Universidad de La Laguna
jueves 10 de noviembre de 2016 - 13:03 CET
En este año en el que se celebra el IV centenario de la muerte de Miguel de Cervantes queremos mostrar los Quijotes que conserva nuestra universidad. Puede sorprendernos su corto número con respecto a otras universidades, pero hay que tener en cuenta que la constitución de nuestra colección bibliográfica universitaria está marcada fundamentalmente por tres hechos: la naturaleza de los estudios que se han impartido, la procedencia de las obras y la lejanía geográfica.
La mayor parte de nuestra colección bibliográfica patrimonial se nutre de la desamortización de Mendizábal, los fondos bibliográficos procedían de los conventos, por lo tanto predominaban obras de teología, derecho, filosofía, matemáticas, física o medicina, habían pocas obras literarias, excepto las clásicas o las místicas. Esta es la razón de la escasa representación de la obra cervantina en nuestra biblioteca, y las que hay del insigne escritor en su mayor parte proceden de algunas donaciones particulares.
El ejemplar más antiguo de nuestra colección es el titulado Le Valeureux Don Quixote de la Manche ou l’histoires de ses grands exploicts dàrmes, fideles amours & aduentures estranges … impreso en París por Jean Füoet en 1620, corresponde a la tercera edición de la traducción francesa realizada por César Oudin, que fue el que marcó todas las traducciones realizadas hasta la mitad del S.XIX. Este curioso ejemplar procede del Convento de Santo Domingo, aunque consta en la portada que en 1667 su propietario fue Arabold von Bobart.
Disponemos de cuatro ediciones impresas en el siglo XVIII: la de 1765 realizada por Manuel Martín en cuatro tomos, que se engloba dentro de las ediciones populares conocidas como Quijotes de surtido, ilustrada con cuarenta y cuatro grabados xilográficos, cuyo segundo volumen donó a la biblioteca el profesor Juan Álvarez Delgado en 1988. La impresa por Antonio de Sancha en 1777 por encargo de la Real Compañía de Impresores y Libreros del Reino, en cuatro volúmenes e ilustrada con grabados de Manuel Monfort, sobre dibujos de José Camarón. Su donación se debe al licenciado Ignacio Antonio de Benavides y Méndez, que fue alcalde mayor de Tenerife. La famosa tercera edición de 1787 corregida por la Real Academia Española e impresa en Madrid por la Viuda de Ibarra, hijos y Compañía, en seis tomos; que incluye la Vida de Cervantes por Vicente de los Ríos y cuyas ilustraciones fueron dibujadas por Isidro y Antonio Carnicero y grabadas por Fernando Selma, J. Fabregat y Manuel Salvador Carmona, entre otros. De esta edición conservamos dos ejemplares, uno de ellos donado por los herederos de José Agustín Álvarez Rixo en el año 2014 y otro de los propios fondos de la Biblioteca, con las iniciales J.N.A. La última, también impresa en Madrid por Sancha entre 1797-1798, está considerada la primera edición española comentada, estuvo al cuidado de Juan Antonio Pellicer y contiene ilustraciones de José Camarón y Luis Paret y Álcazar.
En el siglo XIX la presencia de la obra cervantina es más abundante, contamos con la edición comentada por Diego Clemencín e impresa por Aguado de 1833-1839; la edición anotada por Nicolás Díaz de Benjumea e ilustrada por Ricardo Balaca, impresa en Barcelona por Montaner y Simón en 1880-1883; la edición de la Librería de la Viuda de Hernando y Cª de 1894, también comentada por Diego Clemencín.
Entre la ediciones facsímiles, conservamos la realizada por Montaner y Simón en Barcelona en el año 1897 de las primeras ediciones de la obra cervantina de 1608 y 1615 de Juan de la Cuesta, que es notable por su técnica fotolitográfica y por su bonita encuadernación editorial en tela y piel a cargo del encuadernador barcelonés Hermenegildo Miralles.
Además conservamos dos de las ediciones de El buscapié de Adolfo de Castro, impresas en Cádiz en 1848 y 1851. Esta obra es una divertida curiosidad literaria en la que su autor se inventó el descubrimiento de una presunta obra desaparecida de Cervantes y dió lugar a una de las mayores polémicas cervantinas del S.XIX entre Adolfo de Castro y los eruditos Bartolomé José Gallardo y George Ticknor.
Con la donación de la biblioteca del crítico literario Ventura Doreste y su mujer Josefina Zamora ingresaron, entre otras que podamos destacar: la edición publicada por Saturnino Calleja alrededor del año 1924; la traducción inglesa de Charles Jarvis, con anotaciones de James Fitzmaurice-Kelly publicada por la Universidad de Oxford en 1907; un ejemplar del prospecto anunciador de la edición ilustrada por Tussello y editada por Tasso de 1905y la edición 1965 ilustrada por Salvador Dalí, que fue donada por la poetisa Ana Mª Fagundo.