El láser: la luz que ha cambiado nuestras vidas
miércoles 15 de abril de 2015 - 12:42 CEST
Una de las tecnologías más importantes basadas en la luz es el láser. Se puede considerar la revolución científica más importante del último siglo, dado el enorme impacto que el desarrollo de las fuentes de luz láser tiene en nuestra sociedad. Conceptualmente ha supuesto el dominio de la luz: hemos pasado de ser meros observadores de los fenómenos naturales relacionados con la luz a ser protagonistas de una auténtica revolución tecnológica basada en el láser, con aplicaciones industriales, biomédicas y en telecomunicaciones, que han permitido, entre otras cosas, el desarrollo de Internet.
Láseres en la vida cotidiana
El láser tiene cuatro propiedades específicas que son las que se usan en todas las aplicaciones de la vida cotidiana: monocromaticidad (un color único y muy puro), direccionalidad (por ejemplo, los astrónomos la usan para marcar las estrellas), intensidad (tiene la posibilidad de concentrar en áreas muy pequeñas porque tiene mucha energía en un solo color) y coherencia (tiene que ver con las propiedades ondulatorias de la luz).
Los punteros láser son una de las aplicaciones del láser más comunes. Están basados en un semiconductor láser de bajo precio y producción industrial.
Los lectores de códigos de barras fueron una de las primeras aplicaciones del láser. Hoy en día se trata de una industria que mueve miles de millones de euros al año en todo el mundo.
En los CD, DVD y Blue-ray se emplean láseres de diodo tanto para la grabación como para la lectura de los discos.
En las impresoras láser un haz láser infrarrojo modula la adherencia al papel de gotitas de tinta cargadas eléctricamente.
Los hologramas se obtienen usando láseres de alta potencia. Se emplean como elementos de seguridad y de certificación de originalidad mediante etiquetas láser en tarjetas de crédito, certificados, billetes, etc.
Aplicaciones industriales
Su utilización es muy común en las aplicaciones de corte, soldadura y perforado en diferentes sectores, como el automovilístico, naval y aeroespacial.
Aplicaciones en biomedicina
Su uso más extendido es como bisturí, aunque también se puede emplear como herramienta de diagnóstico y tratamiento. La facilidad con la que podemos llevar la luz láser por el interior del cuerpo humano gracias a una fibra óptica, hace de ésta una herramienta única para la cirugía no invasiva. Tanto en oftalmología como en odontología, los láseres de pulsos ultracortos suponen una alternativa ventajosa frente a las técnicas quirúrgicas convencionales.
En la actualidad, pulsos de luz láser infrarroja se propagan mediante fibra óptica por todo el planeta, haciendo posible las comunicaciones a través de Internet.