Coqui García: «Yo pondría un matemático o matemática en la vida de todos»

FECHA: 27/03/2019

REDACCIÓN JUANJO MARTÍN
FOTOGRAFÍA CARLA GARRIDO

Una pequeña semilla tiene el potencial de generar un gigantesco árbol, un ser que de adulto liberará nuevas semillas que germinan junto a él e irán creando poco a poco un bosque de frondosos árboles que atraerán a toda una cohorte de animales que, a su vez, esparcirán otras semillas que acabarán por generar un completo ecosistema. Y todo esto de una semilla. Pero una semilla por sí sola no puede desarrollar su potencial, necesita como mínimo de un sustrato, nutrientes y la luz del Sol. Si no tiene a su alcance, esto se quedará para siempre en una simple semilla, no habrá árbol ni bosque ni rico ecosistema.

Este símil ecológico lo podemos aplicar a los emprendedores que tienen una idea, o sea, una semilla. Necesitan de la ayuda de otras personas e instituciones para crecer y hacer crecer su ecosistema. A esto se dedica nuestra protagonista, Coqui García, Gerente de Intech Tenerife.

Estudiaste Matemáticas, ¿cuándo y por qué tomaste esa decisión?

Desde los 14 años lo tenía claro. Tuve una profesora en primero de Bachillerato que me animó mucho. Yo, a esa edad, ya sentía que era lo mío. Y no me equivoqué, lo volvería a hacer, aunque no me dedico a la investigación, que era mi objetivo juvenil, sin duda volvería a estudiar Matemáticas.

¿Cómo te ayuda esa formación matemática en tu actual puesto de gerente?

Me ha ayudado a estructurar bien los problemas, o sea, cuando pasa algo, me hago una foto rápida de cuál es el problema, cuáles son las posibles soluciones y, antes de elegir una, pensar en cuáles pueden ser las soluciones posibles alternativas. Estoy muy acostumbrada a que, cuando se plantea una complicación, rápidamente me hago una estructura, localizo las posibles salidas y luego tomo una solución. Creo que eso es lo que las Matemáticas me aporta en mi día a día. También tengo una cierta obsesión con medirlo todo. No vale sólo con planificar y ejecutar, tengo un gran empeño en saber si lo estamos haciendo bien o si lo podemos hacer mejor, siempre quiero ir en busca de la mejora.

¿Nuevas salidas profesionales para los matemáticos?

Yo pondría un matemático o matemática en la vida de todos (se ríe). A priori se puede pensar que una persona que ha dedicado parte de su vida a estudiar complicados procesos matemáticos no tiene su lugar en una empresa, sin embargo, esa formación nos ayuda a pensar de forma diferente, a ver los problemas de otra manera y sugerir nuevas soluciones. Evidentemente, lo ideal sería tener un grupo multidisciplinar porque, aunque se piensa lo contrario, los científicos son muy creativos. Para ciertos ámbitos de la investigación se necesita ser muy creativo, ya estés trabajando en matemáticas u observando animales.

Llevas muchos años en el mundo del emprendimiento, apoyándolos ¿ha ido cambiando el perfil del emprendedor?

Lo que he notado es que ha cambiado mucho la preparación con la que cuentan. Antes venía cualquier persona con una idea, no sabía nada más sobre cómo llevarla a cabo, tenían muchas lagunas. Ahora también llegan con una idea, pero tienen muy claro en qué consiste emprender, todo el esfuerzo que hay detrás y la formación que necesitan, saben lo que es un modelo de negocio y maneras de ejecutarlo. También he notado que ahora hay muchos más emprendedores que hace diez años. Cuando comenzamos hace diez años, lo hicimos con oficinas que han ido creciendo poco a poco, muy lentamente, ya que no teníamos una gran demanda de esos emprendedores. Ahora la situación es diferente, ya que no solo nos demanda esos programas de formación, también espacios. En estos momentos los tenemos todos ocupados, por eso estamos construyendo en la isla nuevos enclaves para esos emprendedores y para empresas.

¿Cuáles crees que son los principales problemas que tiene la mujer emprendedora directiva?

Culturalmente, la sociedad no las tiene normalizadas, se ve como algo diferente. Lo tengo constatado, cuando vienen grupos mixtos de promotores, a la hora de presentar el proyecto, de ser el portavoz, siempre es un hombre quien toma ese rol. De alguna forma, todos tenemos en nuestra cabeza que ese papel ejecutivo es para el hombre. Evidentemente no es porque las mujeres no podamos, pero parece que siempre nos quedamos en lugares menos visibles. Por este motivo, desde Intech Tenerife sacamos el proyecto WomenIN. La idea es identificar a mujeres que tuvieran un proyecto propio o en un grupo mixto. Lo que hacemos es que, a la hora de presentar el proyecto, diseñarlo, venderlo, etc. le damos la visibilidad a ellas, un poco para romper con esa imagen que no está normalizada.

¿Qué proyectos tienes para el futuro?

Estoy muy ilusionada con esta nueva etapa de gerente de la empresa, tengo mucha ilusión de que el Parque despegue como parque tecnológico. Hasta ahora hemos hecho una importantísima labor haciendo proyectos de innovación, eso lo seguiremos haciendo, pero ahora tendremos además unos enclaves de mayores dimensiones, para empresas locales y de fuera, ahora nos dedicaremos a atraer a empresas tecnológicas e innovadoras para que se establezcan aquí y colaboren con empresas y emprendedores locales. Mi ilusión está ahora centrada en que el parque diversifique la economía, impacte en el PIB de la isla, genere empleo y ataje la fuga de talento.