Diversos estudios sobre el papel de las televisiones públicas en España han constatado su deterioro y el incumplimiento de su obligación de servicio público. Este incumplimiento supone un elemento muy preocupante para una sociedad democrática, dado que los medios deben ser los garantes del buen funcionamiento de las instituciones políticas y sociales.
Estas conclusiones se presentaron hoy, lunes 7 de diciembre, durante el VII Congreso Internacional Latina de Comunicación que se celebra en la Universidad de La Laguna, que hasta el próximo viernes 11 congregará a más de 250 investigadores de universidades españolas, europeas y americanas y cuyas ponencias se agruparán en más de 25 mesas temáticas.
Esta preocupación ha movido a varios grupos de investigación de diversas universidades españolas a analizar el desempeño de los medios públicos y, en particular, el caso de Radio Televisión Española. Dichos estudios demuestran que en la corporación estatal existe una “gran desconexión con las inquietudes del público” que se puede corroborar tanto en el contenido informativo como en el uso que se hace de las redes sociales para buscar la interacción con la audiencia.
En un análisis comparativo entre la televisión pública española y la finlandesa, los investigadores de la Universidad de Sevilla María Lamuedra, y de la Universidad Rey Juan Carlos José García de Madariaga destacan que RTVE ha dejado de liderar el panorama informativo y consideran, tras entrevistar a trabajadores del medio, que es consecuencia directa del cambio de gobierno y la reforma de 2012, en la que el Ejecutivo volvió a tomar el control de la dirección del ente. En su investigación destacan que se ha “reducido de forma severa la calidad de los contenidos informativos en relación al pluralismo, que se corresponden con la significativa baja de audiencia”.
La desconexión con la audiencia también es analizada por los investigadores de la Universidad Jaume I Jessica Izquierdo y Pablo López, que advierten que pese al tamaño de RTVE no aprovechan las redes sociales para interactuar con la audiencia. En su estudio sobre el uso de Twitter por parte de la corporación, corroboran que no hay intercambio con los usuarios, con apenas un 1% por ciento de respuesta, y que más de dos tercios de los mensajes son programados. A juicio de estos investigadores, la televisión pública tiene un reto en su relación con las nuevas audiencias, y es precisamente la que debería tener el liderazgo en el contexto digital actual.
Canal 9
El proceso que vive la RTVE se extiende a otras televisiones, como Canal 9 en la Comunidad Valenciana. El investigador de la Universidad de Valencia Carlos López-Olano destacó la importancia de la pluralidad en las televisiones públicas y lamentó el cierre del canal, que atribuyó exclusivamente a “decisiones políticas”.
En su estudio destaca que hubo un claro “deterioro del servicio público” y una “falta de pluralidad endémica en los informativos”. Sin embargo, matizó que no hubo relación directa entre la calidad del contenido informativo y la bajada de audiencia, aunque desde el punto de vista comercial, que fue la decisión por la cadena, el fracaso del canal “estaba anunciado”.
