La Universidad de La Laguna y el Ayuntamiento de La Laguna han firmado hoy, lunes 16 de mayo, un convenio marco de colaboración mediante el cual ambas instituciones pretenden reforzar las ya fluidas relaciones existentes entre ambas, con el objetivo último de reafirmar la condición del municipio como ciudad universitaria. El acuerdo fue rubricado por el rector de la institución académica, Antonio Martinón, y el alcalde de la corporación local, José Alberto Díaz.
Como señala el texto del convenio, “la ciudad de La Laguna no se reconoce sin Universidad”. Ese vínculo común prestigia a ambas instituciones que, a lo largo de los años, han colaborado conjuntamente en varias iniciativas. Sin embargo, los proyectos comunes deben adaptarse a “las nuevas exigencias y demandas del momento sin perder su identidad histórica”, motivo por el cual las dos organizaciones han decidido renovar y actualizar el acuerdo de colaboración que ya se había firmado en 2011.
Como se explicó a lo largo de la presentación de este acuerdo, los fondos europeas han propiciado el desarrollo de la ULL en las últimas décadas, pero al hacerlo, se ha sacado la institución del casco urbano para trasladarla a campus como los de Anchieta y Guajara, en la periferia urbana. El convenio pretende generar acciones comunes que, de algún modo, compensen este alejamiento físico del centro docente y permita aumentar su presencia en el centro histórico.
Para ello, el acuerdo contempla diferentes líneas de actuación y, de hecho, ya hay previstas acciones concretas: sin ir más lejos, la ULL entregará próximamente los premios de sus certámenes literarios en el Teatro Leal, administrado por el ayuntamiento. Y, por su parte, está previsto que la corporación local celebre actos en el Paraninfo de la institución de educación superior.
El acuerdo contempla acciones especiales sobre inserción laboral y planificación estratégica de actividades culturales. La ULL, además, podrá realizar acciones de asesoría y auditoría para el ayuntamiento en diferentes materias aprovechando el potencial de su plantilla docente e investigadora en diferentes materias. Y, además, existe la posibilidad de que ambas organizaciones concurran como socias en convocatorias internacionales de fondos para el desarrollo de actividades de investigación o desarrollo local.
El convenio también señala la posibilidad de realizar acciones formativas y educativas; de extensión universitaria para difundir la cultura y el arte; organización de eventos sobre ciencia, tecnología y fomento de las vocaciones científicas; actividades deportivas y de fomento de los hábitos de vida saludables; difusión del patrimonio histórico, cultural y científico; y, en general, cualquier otra acción de interés común.
Tendrá una vigencia de cuatro años a partir de la fecha de la firma y, como es habitual en las convenios-marco, especifica que cualquier actividad que vaya a organizarse en el ámbito de este acuerdo deberá formalizarse mediante un convenio específico. Una comisión mixta con integrantes de ambas partes se encargará de velar por el correcto desarrollo del acuerdo y de planificar las acciones de colaboración.
