El Proyecto Calypsos de apoyo a la inclusión social, a las necesidades específicas y la mejora de competencias básicas para personas reclusas en Europa ha presentado recientemente en Bruselas su avance de resultados finales. En esta iniciativa han intervenido cuatro universidades europeas: La Laguna, Almería, do Minho (Portugal) y di Roma Sapienza (Italia), así como las ONG Plena Inclusión Canarias y Asociación Meridianos, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y el Instituto degli Innocenti. La coordinación del proyecto corresponde al Centro de Educación para Personas Adultas de Santa Cruz de Tenerife.
La prioridad de la Asociación Estratégica CALYPSOS, que se enmarca en la convocatoria del año 2016 del programa Erasmus +, ha sido enfocar la educación en prisiones atendiendo a la diversidad y a la lucha contra la discriminación y la segregación del colectivo de personas reclusas. Esto es así en la medida en que las tasas de éxito escolar y titulación bajas de las personas en prisión repercuten en una mayor exclusión social que dificulta aún más su reinserción en la sociedad actual.
Desde esta perspectiva, CALYPSOS considera que las características de la población penitenciaria hacen que una parte considerable de las personas en prisión tengan necesidades específicas de apoyo educativo (NEAE) que mediatizan su rendimiento académico. Estas NEAE incluyen déficits cognitivos relacionados con la atención, la planificación, la memoria, la solución de problemas y el autocontrol, entre otros.
Como estos déficits se han relacionado con el funcionamiento ejecutivo, desde CALYPSOS se plantea que la mejora de las tasas de éxito y de titulación actuales puede pasar por la detección de las carencias específicas en funciones ejecutivas de los internos que asisten a la educación para personas adultas en prisión.
En las conclusiones del proyecto se aboga por trabajar con los déficits cognitivos evaluados y utilizar estrategias para potenciar el entrenamiento de la planificación, teniendo en cuenta que los niveles de flexibilidad y memoria son los adecuados. Asimismo, se propone centrarse en supuestos prácticos, aumentando la capacidad de razonamiento y ampliando la memoria de trabajo. Por último, se enfatiza la importancia de comenzar a aplicar estas innovaciones con los internos más jóvenes.