20 años buceando y más de 5.000 inmersiones son currículum de sobra para escuchar lo que el fotógrafo submarino Francis Pérez tiene que decir sobre el frágil equilibrio que reina allá abajo gracias, sobre todo, a lo que hacen los humanos desde aquí arriba. Su diagnóstico confirma uno de los problemas que, últimamente, están dando mucho de qué hablar: “Hemos convertido el mar en un basurero. Todo lo que producimos y desechamos no desaparece, sino que ahora está en el fondo en forma de plástico”.
Imágenes de la inauguración de la muestra
El pasado jueves 7 de marzo se inauguró en el Espacio Cultural La Capilla de la Universidad de La Laguna su exposición “Habitantes del Suroeste”, una muestra fotográfica que pretende abrir una pequeña ventana a lo que no vemos y denunciar que “vivimos de espaldas al mar”. Mañana, 12 de marzo, será uno de los invitados a la decimoctava edición de ULL Debates que reflexionará sobre la protección las Zonas de Especial Conservación en Canarias.
El fotógrafo canario ganó en 2017 el primer premio World Press Photo en la categoría de naturaleza con la imagen de una tortuga boba que trata de nadar envuelta en una red de pesca. Convertida ya en un símbolo mundial de la conciencia medioambiental, lo que quizás muchos no saben es que la instantánea fue tomada en Tenerife. “Muchas personas desconocen que aquí tenemos una gran riqueza con ballenas, tiburones, calderones y muchas especies más y lo que no se conoce, no se puede proteger”, reflexiona Pérez.
“Con este tipo de exposiciones y charlas quiero dar ese toque de atención para que seamos más cuidadosos porque, curiosamente, aunque estamos rodeados de mar, vivimos de espaldas a él. No hay educación, ni vigilancia ni control y el resultado son ballenas con estrés o tortugas con caparazones rotos, por ejemplo”, afirma el fotógrafo.
Para contar esta historia de belleza y degradación a partes iguales, Francis Pérez se ha apoyado en la Asociación Tonina, una ONG dedicada a la investigación y divulgación del medio marino formada por profesionales de la Biología y Ornitología, entre otros. Ellos han documentado muchos de los efectos nocivos de la acción humana sobre la Zona Especial de conservación Teno-Rasca.
Aseguran que la presión urbanística, la modificación del litoral, la contaminación por plásticos y aguas residuales o las actividades turísticas no reguladas como el avistamiento de cetáceos están desequilibrando el ecosistema marino. Para Francis Pérez, es tiempo de tomar medidas: “Es inconcebible e insuficiente que en Tenerife no haya ni una sola Reserva Marina y que en todo el Archipiélago solo haya tres”, denuncia.
El fotógrafo también aboga por que “las actividades turísticas relacionadas con el mar sean de calidad porque, si no, se va a acabar la gallina de los huevos de oro”. Y, por supuesto, desea que Canarias sea finalmente declarada santuario de tiburones “con los tiburones azules como embajadores”.
Actualmente, solo Bahamas, las islas Maldivas, Honduras, Tokelau (Nueva Zelanda), Palaos (Micronesia), Dominica y las islas Marshall ofrecen a los escualos un espacio marino donde la pesca está prohibida. El Archipiélago Canario es, por ejemplo, uno de los refugios más importantes para uno de los tiburones más amenazados del mundo: el angelote. “Tenemos que conseguir que nadie pesque ni un angelote aquí”, finaliza el fotógrafo.
La exposición “Habitantes del Suroeste” permanecerá abierta al público hasta el 1 de abril de 2019. Puede visitarse de lunes a viernes de 17:00 a 20:00 horas. La entrada es gratuita.
La nueva edición de ULL Debates “La vida en nuestros mares: ¿cómo debemos abordar la protección las Zonas de Especial Conservación?” se celebra mañana, 12 de marzo, a partir de las 19:30 horas, en el Paraninfo de la Universidad de La Laguna. La entrada es gratuita hasta completar el aforo.
(Fotos y video: Emeterio Suárez (CC BY 3.0)