El Consejo de Gobierno de la Universidad de La Laguna ha aprobado en su sesión de hoy, lunes 7 de junio, los criterios generales para la docencia y evaluación durante el curso 2021-2022 que serán tenidos en cuenta a la hora de redactar las guías docentes correspondientes, cuya instrucción para su elaboración también fue aprobada. Esta propuesta establece dos escenarios posibles: el 0, que correspondería al modelo presencial total previo a la pandemia, y el 1, correspondiente al sistema que se está aplicando actualmente en la institución, conocido como “presencialidad adaptada”.
El documento fue presentado ante el órgano colegiado por el vicerrector de Innovación Docente y Calidad, Néstor Torres, quien avanzó que, teniendo en cuenta las actuales previsiones sobre la evolución de la pandemia, es presumible que durante el primer cuatrimestre del nuevo curso se desarrolle bajo el escenario 1 y, si todo va según lo previsto, el segundo cuatrimestre lo haría en el escenario 0. Pero todo ello dependerá de cómo se desarrolle la situación sanitaria.
En este sentido, Torres recalcó que en todo momento se tendrá la vista puesta en los indicadores sobre la pandemia, y de entrada se mantendrán ciertas medidas de higiene, distanciamiento y seguridad porque en la actualidad siguen existiendo ciertas incertidumbres acerca del porcentaje de vacunación que se alcance al inicio del curso, la posible existencia de nuevas variantes del coronavirus o el hecho de que las vacunas erradican la virulencia de la enfermedad, pero no su propagación.
En mismo vicerrector también fue el encargado de presentar a la aprobación del Consejo de Gobierno la reedición el próximo curso de dos títulos propios destinados al profesorado de la institución y que ya se están impartiendo en la actualidad: un experto sobre docencia universitaria, especialmente dirigido al profesorado novel que inicia sus pasos profesionales en la institución; y un certificado de formación específica sobre competencias digitales para la docencia, un ámbito que Torres recordó que cobra cada vez más relevancia dado que la tendencia de las instituciones académicas es la de ir hacia un modelo formativo híbrido, que combine la presencialidad con la virtualidad.
Las primeras ediciones de ambos títulos han contado con una gran aceptación entre el profesorado, superando ampliamente el centenar de solicitudes, por lo que dada su alta demanda se ha estimado oportuno reeditarlos. Se han traído a la consideración del órgano para que, tras su refrendo, haya tiempo de organizar las nuevas ediciones con vista a poder ofrecerlas el próximo curso.
Finalmente, la vicerrectora de Proyección, Internacionalización y Cooperación, Lidia Cabrera, presentó la “Estrategia de Cooperación Internacional para el Desarrollo de la Universidad de La Laguna”, que también contó con el apoyo de los consejeros. Explicó que el propósito del texto es sensibilizar y visibilizar las actuaciones de la institución en este ámbito y definir un horizonte hacia el que dirigirse para fortalecerlas. “La Cooperación Universitaria al Desarrollo cada vez cobra más relevancia no solo por solidaridad sino por la necesidad de formar a los estudiantes con una perspectiva internacional e intercultural para enfrentarse a ciertos retos del presente y futuro”, explicó.
La vicerrectora reconoció que la actuación de la Universidad de La Laguna hasta la fecha en materia de cooperación ha sido “intermitente y modesta”, razón de más para lanzar unas directrices de actuación como estas que tiene en cuenta tanto las fortalezas como las debilidades de la institución, pero apuntan hacia un crecimiento futuro, ya que se posee un profesorado comprometido y un alumnado con inquietudes. Aclaró, además, que el modelo de cooperación del que se parte no es el clásico de tipo asistencial desde el norte hacia el sur, sino un modelo colaborativo que impulse el trabajo común en proyectos concretos entre las instituciones que aportan y las que reciben la ayuda.