La Cátedra Fundación Cepsa de Transición Ecológica e Innovación de la Universidad de La Laguna ha dado inicio a su actividad formativa de este año con una clase magistral online sobre los proyectos de investigación de la compañía energética, impartida por la directora del Centro de Investigación de Cepsa, Joana Frontela, y el responsable del área de Químicos y Nuevos materiales del citado centro, Jesús Lázaro.
La directora de la Cátedra, Andrea Brito, destacó en la presentación de la sesión que esta clase magistral retoma el ciclo iniciado el año pasado e hizo hincapié en la importancia del intercambio de conocimientos y formación entre los profesionales de Cepsa y los docentes investigadores de la Universidad de La Laguna, al mismo tiempo que destacó la simbiosis entre investigación e innovación. «Las clases magistrales son una gran herramienta para el intercambio del conocimiento. Al poner en común sus experiencias, los investigadores de las empresas y de la Universidad pueden beneficiarse mutuamente de ellas, además de que suelen surgir nuevas ideas de colaboración beneficiosas para ambas partes y, por ende, para la sociedad”, afirmó y añadió: “En este caso, el personal de la Universidad de La Laguna asistente ha podido conocer cómo ir de un laboratorio a la industria, y la sociedad ha podido ver cómo llegan a ser importantes en su día a día los resultados de un proyecto de investigación”.
Joana Frontela puso el acento en su ponencia en la experiencia de Cepsa en proyectos de investigación e incidió en que estas iniciativas “deben ser siempre una prioridad porque permiten apostar por el crecimiento de la sociedad”. Asimismo, destacó que entre los objetivos de los proyectos impulsados por la energética figura el incremento del volumen de conocimiento para crear nuevas aplicaciones, así como potenciar su transferencia y su divulgación. Añadió que para que un proyecto tenga éxito y se pueda desarrollar requiere, entre otros puntos, contar con el apoyo de la dirección, respaldo económico y financiero, la implicación del equipo que participe, además de que represente valor para el negocio.
La directora del Centro de Investigación de Cepsa se refirió al método científico como ayuda para realizar cualquier proyecto de investigación y establecer los pasos para su desarrollo. En este sentido, puso el acento en la observación como elemento clave, a partir de la cual se genere una hipótesis y se pueda llegar a un resultado. Por otro lado, hizo un repaso de las diferentes fases del proyecto de investigación, entre las que destacó la elección de un objetivo claro y real, con metodología concisa y presupuesto que permita la ejecución racional.
La planificación del trabajo fue otro de los aspectos recogidos, e incidió en la importancia de seleccionar a los socios y de contar con un procedimiento para gestionar los cambios. Respecto a la ejecución, puso de manifiesto que es necesario apoyarse en la realización de experimentos y en las deducciones experimentales, además de la incorporación de acciones correctivas, con seguimiento de actividades, y puso el acento en la necesidad de motivar al personal. Joana Frontela destacó que la finalización de los proyectos de investigación es el paso que conlleva más complejidad, ya que exige una labor analítica e insistió en que el aprendizaje en este ámbito juega un papel fundamental.
Por su parte, Jesús Lázaro se refirió a uno de los casos de éxito desarrollados por el Centro de Investigación de Cepsa, centrado en el desarrollo de un catalizador de isomerización para naftas ligeras, que contó con la participación del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Una iniciativa desarrollada a lo largo de varios años, en los que se pasó por diferentes pasos, desde su abordaje en laboratorio hasta la construcción y puesta en marcha de una unidad nueva con un proceso novedoso en una de las refinerías de la Compañía. A su vez, explicó, se llevó a cabo el registro de la patente en 2015 y la iniciativa ha conseguido consolidarse como un éxito comercial, contabilizándose en estos momentos un total de 20 unidades industriales que utilizan el catalizador de Cepsa.
Amplio programa formativo
Un amplio programa formativo seguirá a lo largo del presente ejercicio a esta primera acción, con otra clase magistral sobre fuentes alternativas de energía para una economía circular sostenible, y dos jornadas formativas que girarán en torno a la transición ecológica y a la eficiencia energética y economía circular.
Asimismo, se incorporará una iniciativa novedosa, el programa de formación en competencias y coaching Alumno 10C, originario de la Cátedra Fundación Cepsa de la Universidad de Huelva. A esto se sumará un curso de redes neuronales Big Data y de machine learning impartido por personal de Cepsa, así como un programa de becarios en prácticas.
Otra de las iniciativas contempladas para este año se centra en la celebración de un congreso de alumnos, profesores y profesionales sobre temas relacionados con la transición ecológica. La apuesta por la formación se completará con la participación de la Cátedra Fundación Cepsa de Transición Ecológica e Innovación de la Universidad de La Laguna en seminarios organizados por el resto de las Cátedras con las que cuenta Fundación Cepsa en Madrid y Andalucía, que girarán en torno al refino del petróleo, los lubricantes y los hidrocarburos.
(Nota de prensa y foto cedidas)