El proyecto “Espacios para el cambio”, impulsado por el Gobierno de Canarias y la Universidad de La Laguna, celebró recientemente el Primer Foro Intergeneracional en la isla de Lanzarote. Este evento, que contó con la participación de un grupo de profesionales del Laboratorio de Innovación Social de la institución académica, se erigió como el primer paso para trabajar de forma colaborativa los diferentes retos que plantea la Agenda Canaria 2030 a través de un Laboratorio Ciudadano Intergeneracional cuya sede se halla en este momento en el CEIP Benito Méndez Tarajano.
Este encuentro abierto reunió en Arrecife a una comunidad amplia de niños y niñas que expusieron a través del arte su visión sobre la Agenda Canaria 2030. De esta manera, el alumnado, que ha estado trabajando en este proceso creativo desde hace dos meses, ha podido mostrar sus avances en pro del desarrollo sostenible. El estudiantado ha contado con la ayuda de sus tutores y ha podido destacar distintas problemáticas que, tal y como señalan, afectan al municipio de Arrecife en el ámbito de dos Objetivos de Desarrollo Sostenible como son el Fin de la pobreza y el Hambre cero.
La forma elegida para expresar estos ODS ha sido la elaboración de un mural que ejemplifica ambos objetivos y a su vez plantear propuestas en torno a estos retos a escala global a través de la canción ‘Un parque feliz’ compuesta en colaboración con las familias. Este proceso ha sido posible gracias a la participación del Laboratorio de Innovación Social de la Universidad de La Laguna, la organización Cambium, la Asociación Voltereta, la artista e ilustradora Evelin Toledano y el equipo docente del centro conformado por María Jesús Rodríguez, Pablo Camacho e Iria Otero.
Esta iniciativa ha sido promovida por la Dirección General de Investigación y Coordinación del Desarrollo Sostenible del Gobierno de Canarias y el Laboratorio de Innovación Social de la Universidad de La Laguna, en colaboración con la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias.
“Espacios para el cambio” sigue trabajando en diferentes islas para la creación de nuevos laboratorios ciudadanos que puedan conformarse como espacios de experimentación colectiva basados en principios como el conocimiento abierto, la participación y el retorno social para hacer crecer ideas viables de transformación social y medioambiental. En este caso serán niñas, niños y jóvenes organizados en grupos de trabajo quienes protagonicen el desarrollo de estas propuestas conectados especialmente con la comunidad local y las personas mayores, así como toda aquella persona que quiera sumarse como agente del cambio.