CampusÁfrica22 acogió en la Facultad de Farmacia de la Universidad de La Laguna dos de sus últimas conferencias, ‘Ciencia ciudadana y salud global’, ofrecida por Rosa Gálvez Esteban, y ‘Moléculas activas antiprotozoarias de origen marino’, a cargo de Jacob Lorenzo Morales.
Gálvez Esteban inició su charla hablando de la participación de la sociedad en proyectos científicos, aunando intereses científicos con los intereses ciudadanos, de tal manera que las dos partes puedan verse beneficiados. Puso como ejemplo la plataforma digital ‘Mosquito Alert’, una app en la que la ciudadanía tiene posibilidades de mandar información a equipos científicos, de tal manera que la ciencia pueda tener información de dónde llevar a cabo su actuación. La doctora destacó que el mosquito es el animal que más muertes causa en el mundo, y que gracias a la colaboración de los ciudadanos mediante esta aplicación se han publicado muchos artículos científicos. También hizo referencia a la creación de juegos de mesa, que en su desarrollo como actividad lúdica crea conciencia sobre cómo la alteración del medio puede generar enfermedades altamente dañinas.
Lorenzo Morales, por su parte, inició su ponencia hablando de las amebas de vida libre, y precisó que en el caso de las acanthamoebas, éstas pueden producir úlceras en los ojos que perforan la córnea. De hecho, son infecciones que pueden producir ceguera y muchos dolores, de tal forma que muchos de los casos se dan en personas que usan lentes de contacto. “La cura ideal es matar ‘al paciente’ con una muerte lenta sin que se entere el organismo”. A lo largo de su charla, Jacob Lorenzo Morales insistió en que es importante la colaboración entre científicos, proyectos y laboratorios. “Sin este trabajo coordinado entre grupos de investigación, no somos nada”.
Ética investigadora
En otra sesión, Isabel Inés Araújo, miembro del comité de ética de Cabo Verde, se centró en los caminos de la investigación científica. Señaló que todo proyecto de estas características debe cumplir con tres objetivos básicos: formar profesionales, realizar estudios y funcionar como institución social; generar conocimiento siempre desde una postura ética, entendida como el comportamiento moral de las personas en la sociedad.
Los principios que son básicos para el desarrollo de una investigación son la autonomía, justicia, vulnerabilidad y la no maleficencia. “Toda investigación debe promover el respeto para la dignidad humana, de tal manera que proteja derechos y salud”. Para que la formulación ética de proyectos sea correcta, es necesario que el propio proyecto científico esté bien formulado. Además, el proyecto deber ser conducido por personas científicamente cualificadas.
Javier Hernández Borges, profesor titular del departamento de química de la Universidad de La Laguna, habló sobre el proyecto ‘Implamac’, para señalar que la contaminación por plásticos es uno de los principales problemas de contaminación a los que se enfrenta la humanidad, no solo desde el punto de vista medioambiental, sino también desde el punto de vista de salud: “Se ha llegado a encontrar microplásticos incluso en la sangre humana”.
Implamac tiene tres objetivos principales; mejora de las metodología de muestreo, con un protocolo común; estudiar el efectos de los microplásticos en la cadenas tróficas en los ecosistemas; y la determinación de contaminantes emergentes en microplásticos en agua y arena de mar.