El grupo de investigación en Botánica Marina de la Universidad de La Laguna (BotMar-ULL) está realizando una serie de monitoreos de los hábitats marinos intermareales y submareales de los deltas lávicos de La Palma, con el fin de estudiar su proceso de colonización progresivo, un proceso por etapas que recibe en nombre de sucesión. El monitoreo comenzó en febrero y se realizan campañas cada dos meses y medio, de tal modo que ya se han realizado tres yen lo que resta de 2022 están programadas otras dos en octubre y diciembre. El proyecto pretende seguir con esta periodicidad de muestreos hasta, al menos, el verano de 2026.
El investigador de este grupo Carlos Alberto San Gil explica que en los vegetales, y especialmente en las macroalgas, su principal grupo de interés, se producen fuertes cambios en la biodiversidad y abundancia de las diferentes especies en el tiempo. Estos experimentos estudian el establecimiento de las especies y su relación con el medio que les rodea. “Digamos que los deltas realmente funcionan, en este sentido, como un laboratorio natural a gran escala para poder estudiar los procesos fundacionales de las comunidades marinas”.
Tanto el monitoreo como la parte experimental se realiza también en una zona de control anexa, las coladas del volcán San Juan que entró en erupción en 1949, un área también conocida como La Bombilla que supone un punto de referencia de las comunidades ya en su estado final de sucesión «clímax».
El efecto fundacional de las comunidades marinas se está estudiando también desde el punto de vista genético, lo cual es uno de los aspectos más novedosos del proyecto, especialmente de un grupo de especies de algas pardas pertenecientes a una misma familia, pero con diferentes estrategias de propagación (reproducción sexual o asexual) y de vida (especies efímeras frente a perennes). “El objetivo, en este caso, es estudiar cómo cambia la variabilidad genética de las poblaciones en relación con el tiempo, y la diferente estrategia de reproducción y vida de las especies”.
El grupo de investigación ha abierto un canal de YouTube en el cual ya han publicado vídeos que resumen las dos primeras campañas y que seguirá actualizándose.
Las primeras campañas se han realizado con el apoyo económico del Vicerrectorado de Investigación y Transferencia, a través de la subvención del Ministerio de Ciencia e Innovación obtenida por la Universidad de La Laguna para la monitorización de la erupción volcánica. El Cabildo de La Palma también apoya el desarrollo de las actividades del grupo en la isla mediante un convenio de colaboración «Campus Océano». La Plataforma Oceánica de Canarias (PLOCAN) es la institución pública y plataforma de investigación que está dando apoyo logístico a la Universidad de La Laguna para el desarrollo del proyecto.
A partir de octubre de este año y hasta 2026, el monitoreo tendrá continuidad dentro de un proyecto de «Generación de Conocimiento» que el Ministerio de Ciencia e Innovación ha concedido al grupo de investigación, con San Gil como investigador principal. Denominado “Naturgrad: gradientes ambientales como laboratorios naturales para conocer el futuro y dinámicas de las comunidades bentónicas marinas”, el nuevo proyecto cuenta con la colaboración de una investigadora de la Universidad de Gotemburgo (Suecia).