El Laboratorio de Desarrollo y Formación en Tecnologías Marinas (LDF-Tecnomar) de la Universidad de La Laguna ha presentado recientemente a empresas y a la comunidad académica buena parte del equipamiento científico que ha adquirido, así como algunos de los proyectos en los que está trabajando. Esta instalación multidisciplinar está liderado por el investigador Carlos Efrén Mora, está ubicado en la Sección de Náutica, Máquinas y Radioelectrónica Naval y ha sido financiado por la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información.
Este espacio facilita que empresas y entidades públicas y privadas colaboren en el ámbito del transporte marítimo y en muchos aspectos relacionados con la biología marina, por lo que está especialmente dotado para desarrollar investigación en dicho ámbito. Su equipo humano es igualmente multidisciplinar, pues cuenta con especialistas del ámbito marítimo, ingeniería, biología y pedagogía.
Específicamente, dispone de equipos para impresión 3D en materiales técnicos resistentes al ambiente marino y la radiación UV, así como equipos de mecanizado y soldadura para la construcción de pequeños componentes en acero inoxidable. También posee equipos audiovisuales, incluyendo una cámara capaz de obtener vídeos con definición 4K y operar hasta a 6.000 metros de profundidad; así como otra cámara capaz de obtener datos termográficos en bruto para la realización de estudios técnico-científicos.
El laboratorio también está equipado con dos vehículos operados remotamente (ROVs), capaces de llagar hasta 160 los metros de profundidad, además de equipamiento orientado a la formación marítima mediante las tecnologías más punteras de realidad virtual, realidad aumentada y realidad asistida, incluyendo tanto equipos para la producción de contenidos 3D a 360º y dispositivos para la visualización de los mismos.
En la presentación, liderada por el vicerrector de Investigación y Transferencia, Ernesto Pereda, estuvieron presentes Santiago Yanes, jefe de División de Innovación y Proyectos Estratégicos de la Autoridad Portuaria; Pedro Pascual, del Instituto Oceanográfico de Canarias; Luis Díaz, subdirector general de Cajasiete; y Carlos González, subdirector de la Cátedra Cajasiete Big Data, Open Data y Blockchain; y Belén Melián, directora de la Cátedra de Economía Azul de la Universidad de La Laguna.
Uno de los proyectos fue presentado por la profesora Peña Fabiani, quien explicó un software para el estudio y detección de plancton en aguas submarinas, desarrollado en colaboración con investigadores de Biología.
Otro proyecto en el que colabora este laboratorio tiene que ver con la puesta en marcha de cámaras infrarrojas en buques de alta velocidad para detectar y prevenir las colisiones de cetáceos con embarcaciones, y en el que la naviera Fred Olsen ha apostado fuertemente por el desarrollo de un sistema automático de control que ya se está instalando en los buques de su compañía.
La sesión también sirvió para conocer los avances del proyecto PLEaMAR, dedicado a la electrificación de la embarcación Añaza P, donado por la Corporación de Prácticos del Puerto de Santa Cruz de Tenerife. El objetivo es sustituir su actual planta energética por un tren de propulsión completamente eléctrico, además de modernizar su instrumentación e instalaciones. Se trata, indicó Efrén Mora, de un trabajo lento que va a requerir muchas horas, y que ha pasado primero por el desmontaje, limpieza y reparación de la infraestructura. El proyecto de electrificación ha dado lugar también a la redacción de una tesis doctoral.
Otra gran iniciativa del Laboratorio de Desarrollo y Formación en Tecnologías Marinas es el proyecto RELAR, que a través de un consorcio europeo pretende reforzar la formación remota mediante realidad asistida. Su objetivo es servir de plataforma para la atracción de investigadores y socios internacionales en el desarrollo de proyectos formativos en el ámbito de las tecnologías marinas. Mediante una exhibición, protagonizada por el doctorando Aarón Acevedo y el alumno de grado Enrique Delgado, se demostraron sus capacidades docentes remotas, así como para solucionar problemas incluso en alta mar, dirigidos a distancia mediante órdenes sencillas.
Dentro de este proyecto se ha desarrollado una aplicación que se ejecuta dentro del dispositivo de Realidad Asistida HMT-1, el cual permite que un instructor pueda cargar documentos y material audiovisual de forma dinámica para que pueda guiar a uno o varios estudiantes en el manejo de equipamiento técnico en instalaciones marinas o industriales, así como evaluar el nivel de competencias adquirido.