El Teatro Circo de Marte de la capital palmera acogió ayer 18 el acto de reconocimiento institucional a los científicos y científicas que han participado activamente en las distintas vertientes del proceso volcánico en las estribaciones de la Cumbre Vieja de La Palma. El Gobierno del Estado con la participación del ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, y de la ministra de Ciencia e Innovación, el Gobierno de Canarias, el Cabildo de La Palma y administraciones municipales de la isla, agradecieron y destacaron el enorme protagonismo que ha tenido la ciencia en la gestión de una de las erupciones volcánicas de mayor entidad y afectación en la etapa histórica de Canarias.
Y lo hicieron con la mayor parte de las personas reconocidas juntas, compartiendo el mismo escenario, visibilizando así una de las claves del trabajo realizado, la confluencia, el diálogo y la cooperación entre organizaciones con distinta dependencia funcional, clave para enfrentar el devenir de un fenómeno natural de la dimensión del volcán de Tajogaite, que estuvo activo durante 85 días, lo que tuvo consecuencias directas en miles de personas y en una parte significativa del territorio insular, alterando sustancialmente el desarrollo de la vida en la comarca de Aridane. De hecho, todavía continúan sin resolverse cuestiones cruciales para la recuperación de la normalidad, como la permanencia de gases tóxicos en el litoral del Valle.
La Universidad de La Laguna estuvo representada por su rectora, Rosa Aguilar, junto a un nutrido grupo de investigadores e investigadoras de diferentes disciplinas. Por ejemplo, en la monitorización del propio volcán y el seguimiento de sus distintas repercusiones, en el estudio de las formaciones que han resultado de la erupción, en el análisis de las diversas oportunidades que ofrecen materiales, entornos y paisajes, en el impulso del proceso de recuperación económica y social, así como en el diseño y acompañamiento de procesos participativos y el desarrollo de proyectos promovidos junto a otras entidades.
Rosa Aguilar con los investigadores de la ULL asistentes al acto.
La rectora manifestó al final del acto su enorme satisfacción por el elevado grado de implicación de las universidades públicas canarias durante todo este tiempo, “desde el primer día, comprometidos muchos de sus equipos de investigación con las distintas facetas de un proceso que adquirió tintes dramáticos por las afecciones a la población del Valle de Aridane”. También valoró la implicación personal de los científicos: “Hemos procurado estar lo más cercanas posible a los palmeros, para contribuir desde la ciencia a conocer y gestionar un fenómeno natural de proporciones desconocidas para las actuales generaciones de canarios”.
“Quiero felicitar y agradecer a nuestros equipos por el trabajo realizado y los resultados obtenidos, que aunque no puedan reparar el grave daño causado, sí que me consta que se han volcado durante todos estos meses para realizar la mejor labor tanto desde nuestros campus como sobre todo aquí, en La Palma”.
La representación científica agradeció el reconocimiento y resaltó algunas de las claves del trabajo colectivo realizado en La Palma durante meses, entre las que destacan la multidisciplinariedad del conjunto de personas participantes, la confluencia y el diálogo interdisciplinar para alcanzar las mejores conclusiones y convertirlas en decisiones adecuadas por parte de las personas y entidades responsables de gestionar la emergencia, la cercanía y el comportamiento de la población palmera, alentando y facilitando la labor científica y la disponibilidad de recursos para desarrollar las tareas necesarias.
Asimismo, se lanzó un mensaje de esperanza a la población palmera, en la medida en que se destacó su comportamiento y resiliencia durante todo este tiempo, fortalezas que ayudarán en el proceso de recuperación tras superar la etapa de erupción. Muchos de los resultados obtenidos comienzan a difundirse a través de distintos cauces, tanto académicos como mediante su transferencia más inmediata hacia otros ámbitos de mayor aplicación, y resultan fundamentales de cara a la gestión futura de este tipo de procesos. “La ciencia seguirá desempeñando un extraordinario papel en el proceso de recuperación de La Palma”, supuso una reflexión compartida.
