Tras el éxito cosechado en la convocatoria del curso pasado, las jornadas de concienciación ambiental de la Universidad de La Laguna volvieron a retomarse la semana pasada con una actividad focalizada en el Bosque del Adelantado de El Rosario. La estructura de estas acciones, de las cuales se desarrollarán otras tres a lo largo de este año, es sencilla: un seminario teórico online que servirá para dar a las personas inscritas nociones básicas sobre la situación del ecosistema que se va a abordar y, al día siguiente, una visita al lugar elegido, para conocerlo mejor y también desarrollar alguna acción de conservación.
Este programa de concienciación ambiental está promovido desde el Vicerrectorado de Infraestructuras y Sostenibilidad y el Área de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Seguridad del Cabildo de Tenerife y, en el caso concreto de esta sesión centrada en el Bosque del Adelantado, también contó con la colaboración de la Cátedra Cultural Científica Jardín Botánico Wolfredo Wildpret, la Asociación Terramare y el Ayuntamiento de El Rosario.
La visita de campo se desarrolló recientemente con una ruta informativa por el paraje, durante la cual se pudo observar su diversidad botánica y se procedió a una recogida de residuos y también a la suelta de algunas aves. La sesión contó con la inestimable participación del profesor emérito y reconocido botánico Wolfredo Wilpred de la Torre.
El día anterior se procedió a un webinar, cuya grabación está disponible en el canal de Youtube institucional, moderado por director de Secretariado de Sostenibilidad y Campus Saludable de la Universidad de La Laguna, Edgar Pérez Herrero. En la primera sesión, la directora de la Cátedra Cultural Científica Jardín Botánico Wolfredo Wildpret y profesora del Departamento de Botánica, Ecología y Fisiología Vegetal Victoria Eugenia Martín Osorio, explicó la riqueza del Bosque del Adelantado desde el punto de vista botánico.
Esta área verde se caracteriza por estar prácticamente inmerso en la zona urbana de El Rosario y, de hecho, se accede a ella a través de un parque y se discurre por ella a través de senderos predefinidos, de tal modo que no todo el bosque es transitable para conservarlo mejor. Tiene una superficie de unos 25.000 metros cuadrados con una gran diversidad, con poco desnivel y una climatología con una media de máximas de temperatura de 24 grados y mínimas de 8, si bien la profesora señaló que falta una estación meteorológica en el propio bosque que permita dar datos más exactos. Hay dos meses de sequía al año, pero la proporción de horas humectantes supera el 70%.
La vegetación es la característica de un bosque de laureles, influenciado por las nieblas que le llegan de manera constante al territorio, además de la lluvia. Martín Osorio detalló que, tanto a través del aula que dirige como de las asignaturas que imparte en el Grado de Ciencias Ambientales, se relanzan visitas frecuentes con el alumnado para controlar las especies vegetales invasoras que afectan al bosque, gracias a las cuales ya hay áreas que están prácticamente limpias.
Seguidamente, Javier Romero, técnico de conservación de la Sociedad Española de Ornitología SEO Birdlife, explicó qué aves son las que abundan en el Bosque del Adelantado y cómo contribuyen al ecosistema. Comenzó explicando la gran riqueza natural que existe en Canarias, algo muy característico de los ecosistemas de islas, y recordó que se dan seis especies de aves endémicas en el archipiélago: mosquitero canario, tarabilla canaria, pinzón azul del Teide, pinzón azul de Gran Canaria, y las palomas rabiche y turqué. En el bosque de El Rosario habitan algunas de ellas, además de especies como el gavilán, el herrerillo, la lechuza, el capirote, el reyezuelo sencillo, el mirlo, el búho chico y el petirrojo. No son fáciles de observar a simple vista, pero se pueden diferenciar sus cantos, señaló.
Estas aves cumplen diferentes funciones en el ecosistema, como capturar insectos, romper semillas, extraer semillas de coníferas, extraer invertebrados del lodo, comer frutos, perforar madera, pescar de diferentes maneras, alimentarse de néctar, y sobre todo, dispersar semillas, permitiendo así que las especies vegetales se expandan por el territorio.
El programa de actividades de concienciación ambiental proseguirá los días 13 y 14 de julio, para abordar la problemática de los microplásticos en la Playa Grande de Arico. Y, ya pasado el verano, se retomará el 10 y 11 de noviembre, con una ruta, limpieza de residuos y liberación de pardelas en el Malpaís de Rasca (Arona); y los días 1 y 2 de diciembre, en torno al bosque de Agua García (Tacoronte), para limpieza de residuos y control de especies exóticas.