El Parque Rural de Anaga, declarado por la UNESCO Reserva de la Biosfera en 2015, es un área orográfica única con una gran biodiversidad; de hecho, cuenta con la mejor representación de la Laurisilva de Tenerife y alberga otros ecosistemas insulares de vegetación costera, cardonal-tabaibal y bosque termófilo.
Durante los próximos meses, esta Reserva de la Biosfera será objeto de estudio de un proyecto íntegramente financiado por la Fundación Santa Cruz Sostenible y Fundación Cepsa, con el que se pretende estudiar por primera vez la presencia de microplásticos en los recursos de suelos y aguas subterráneas. Los datos obtenidos permitirán evaluar el grado de afección por microplásticos del parque en suelos de zonas de vegetación natural, zonas agrícolas y zonas vinculadas a núcleos poblacionales, así como la posible transferencia de microplásticos a las aguas subterráneas. Este estudio también permitirá establecer las bases para futuras investigaciones sobre los efectos en diferentes procesos ecosistémicos, así como el grado y tipo de potenciales acciones a llevar a cabo.
El estudio será llevado a cabo por el grupo de investigación en Química Analítica Aplicada (AChem) de la Universidad de La Laguna, coordinado por el catedrático de Química Analítica Javier Hernández Borges, que cuenta con una amplia experiencia en la determinación de microplásticos en el medio ambiente de Canarias, incluyendo suelos y aguas.
En este mes de septiembre comenzarán a llevarse a cabo los muestreos que tratarán de abarcar diferentes zonas del parque. Los investigadores esperan encontrar sobre todo fibras sintéticas, que algunos autores han definido como el tipo de microplástico más común en el medio ambiente.
Estas fibras son fragmentos filiformes de plástico (principalmente de poliéster, nailon, acrilatos u otros materiales sintéticos) con una longitud de entre 5 mm y 10 µm y un ancho de, al menos, 1,5 órdenes de magnitud menor, aunque la mayor parte de estas, tienen longitudes inferiores a 1 mm. Proceden principalmente de los tejidos sintéticos pudiendo llegar a lugares remotos por vía atmosférica y llegar a los suelos por deposición húmeda o seca además de por actividades antropogénicas.
Un estudio reciente llevado a cabo por el grupo de investigación AChem ha puesto de manifiesto que en el Parque Nacional del Teide se están depositando microplásticos con la nieve y que también podrían estarlo haciendo con la lluvia o bien por simple deposición seca. Se trata de sorprendentes resultados que ponen de manifiesto que, si bien a simple vista los microplásticos no se ven, es importante su determinación incluso en zonas protegidas y en sistemas aislados y remotos como son las Islas Canarias.