La Universidad de Verano de Adeje ha llevado a cabo el curso teórico práctico de estrategias integrales de abordaje en obesidad y cáncer, dirigido por Hugo Bustillos. Se trató de una jornada en la que estuvo acompañado por Javier Butrageño, fundador de Obesity Management School y coordinador del grupo de ejercicio y obesidad de la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO); Jorge Cubrias, médico clínico con posgrado en patologías cardiometabólicas y vasculares; y Pablo Ruyman, doctor en Ciencias Médicas y licenciado en Medicina y Cirugía.
Durante la sesión, en la que todos los especialistas coincidieron en la importancia de realizar ejercicio físico tanto en la salud como en la enfermedad, además reflexionaron sobre el impacto del ejercicio físico, dado que incide a nivel molecular y debe ir acompañado de una buena alimentación para potenciar la mejora de la masa muscular en pacientes con cáncer.
«Dependiendo del estado físico en el que se encuentre una persona, hay que ajustar el ejercicio, es decir, hay que adaptarlo todo lo posible para que no pierda la motivación, avance poco a poco y recupere el estado físico previo al tratamiento al que se encuentra sometida esa persona”, señaló Bustillos.
En el caso del cáncer, enfermedad que además afecta la masa muscular y la fuerza, se hace fundamental tener una motivo por el cual es importante tener una adecuada alimentación, indicaron los profesores. A lo largo del curso plasmaron diferentes evidencias físicas sobre la influencia positiva que tiene el ejercicio físico y la buena alimentación en pacientes con cáncer, quienes evidentemente deben tener diseñado un programa de entrenamientos especializados para pacientes oncológicos, dependiendo el tipo de cáncer que padezcan.
Bustillos hizo hincapié en la importancia de este curso con el que se está descubriendo que hay alimentos que si se consumen en abundancia inciden negativamente como aquellos que tienen grasas o hidratos de carbono. «Es fundamental una buena alimentación cuando estamos sanos, pero aún más cuando estamos enfrentando una enfermedad”, aseguró.
El deporte genera una mejora en el estado físico del cuerpo, pero también juega un papel fundamental en el estado de ánimo de las personas, libera estrés, mejora la movilidad, contribuye a estar mejor de manera integral, etc. Por último, el profesor Bustillos finalizó señalando que “el deporte y la alimentación saludable son herramientas terapéutica que posibilitan una mejor calidad de vida y debemos tenerla presente siempre”.