Los mayores referentes nacionales en tecnología educativa se reúnen estos días en la Universidad de La Laguna para hacer balance de la docencia y la investigación generada en esta materia en los últimos treinta años, cuando se creó esta red nacional. “En 1992 no éramos conscientes de lo que la tecnología iba a suponer para el sistema educativo”, resaltó Lorea Fernández, la presidenta de la red nacional que los aglutina. “Estos docentes han creado un área de conocimiento que se ha convertido en una disciplina científica y en un ámbito de conocimiento propio”.
En estas XXX Jornadas Universitarias de Tecnología Educativa (JUTE) ha quedado patente que la tecnología es una materia clave en la formación de los docentes y que este colectivo ha impulsado igualmente la docencia online, como recordó Fernández. “Habéis creado escuela: habéis formado a una generación de investigadores e investigadoras que continuarán ahora con esta labor”.
De izquierda a derecha, la representante del Cabildo de Tenerife, un directivo del PCTT, la decana de la Facultad de Educación, el rector, el presidente del congreso, una representante del comité local y un directivo de Cajasiete.
El congreso ha sido organizado por el catedrático Manuel Area Moreira y su grupo de investigación, Edullab, pionero en el ámbito de las tecnologías de la información y las comunicaciones aplicadas a la investigación, pues lleva en marcha desde 1999. De la actividad del grupo y del propio Area Moreira también ha emanado la Cátedra Fundación Mapfre de Tecnología de la Educación, activa desde 2017.
Area señaló en el acto de apertura que hace ya 25 años esta universidad acogió uno de los congresos anuales, cuando apenas 40 personas de todo el país se dedicaban a esta materia. “Hoy somos más de 300 los investigadores e investigadoras que participamos en JUTE, muchos de forma presencial y otros que se han conectado online”.
Tanto Cajasiete como el Parque Científico Tecnológico apoyan este encuentro profesional, que se desarrolla en la Facultad de Educación, tanto en su módulo A (C/Heraclio Sánchez, s/n) con las sesiones plenarias como en el B (Edificio Central), con los simposios y comunicaciones.
Como señaló la decana del centro anfitrión, Esperanza Ceballos, estas jornadas son una cita ineludible para estar al tanto de las últimas novedades en tecnología educativa, a manos de los docentes más inspiradores. Con todo, sostuvo que no hay que perder de vista que la tecnología debe en este caso estar al servicio de la educación.
El rector, Francisco García, señaló por su parte que este binomio tecnología/educación cobra hoy la máxima relevancia, convirtiéndose así en una palanca transformadora para afrontar los nuevos
Una imagen del público asistente.
retos. “Hace 30 años no existía Internet, y desde la perspectiva tecnológica podríamos hablar de un mundo casi arcaico”, recordó. “Es muy positivo ver de dónde venimos para reconocer el enorme avance que hemos logrado”.
También tuvo palabras de halago para áreas temáticas del congreso, que abordan cuestiones tan relevantes como la cultura digital y educación, la alfabetización y competencias digitales, la transformación digital de las organizaciones o las tecnologías digitales y la educación inclusiva.
