La revista Science Advances ha publicado un artículo que da cuenta de la investigación paleontológica en la cual han sido descubiertos restos de una nueva especie de dinosaurio hadrosauroideo en Chile. En los trabajos han participado investigadores de universidades chilenas, brasileñas, argentinas y alemanas, así como la propia Universidad de La Laguna a través de la paleontóloga del Departamento de Biología Animal, Edafología y geología Penélope Cruzado Caballero.
Los dinosaurios hadrosaúridos, también conocidos como los «pico de pato» o “vacas cretácicas”, fueron un grupo muy diverso de dinosaurios herbívoros que vivieron durante el periodo Cretácico, hace aproximadamente entre 85 y 65 millones de años. Sus restos se pueden encontrar fundamentalmente por todo el hemisferio norte y, de manera algo más escasa, en el hemisferio sur, donde se concentran en América del sur (hasta ahora sólo en Argentina), África y la Antártida.
La nueva especie hallada en esta investigación procede del extremo sur de Chile, vivió hace unos 72 millones de años y ha sido denominada Gonkoken nanoi. La excavación en donde fue hallada comenzó en 2013 en el valle del Río de las Chinas de la Región de Magallanes del Chile subantártico, en el extremo sur de la Patagonia meridional.
Gonkoken no es una especie más en una larga lista de especies de hadrosaúridos, pues el descubrimiento y posterior estudio de sus restos ha traído sorprendentes descubrimientos. Así, esta especie retiene caracteres primitivos junto con algunos otros caracteres más derivados, y el análisis del conjunto de todos ellos arrojó un parentesco con especies norteamericanas que vivieron varios millones antes y ya estaban extintas en el momento en el que Gonkoken paseaba por tierras chilenas.
Esto suscitó muchas preguntas al equipo investigador, ya que las únicas especies descritas para Sudamérica, todas ellas argentinas, son hadrosaúridos derivados, mientras que Gonkoken es el primer integrante de un posible clado más primitivo y diferente al que trajo al resto de especies a territorios americanos. El clado es la denominación biológica de toda agrupación que incluya el ancestro común y todos sus descendientes, vivos o extintos.
Otra de las cosas curiosas de Gonkoken es su reducido tamaño, pues se estima que mediría entre 3,5 y 4 metros. Esto recuerda el caso de Telmatosaurus transsylvanicus, un hadrosauroideo basal europeo de finales de Cretácico que comparte con Gonkoken el hecho de ser especies relictas (en retrogresión) que sobrevivieron al desplazamiento y sustitución por parte de especies más derivadas (los hadrosáuridos), y poseer un tamaño corporal reducido. En el caso de Telmatosaurus, se explica su tamaño y carácter relicto al vivir aislado en una isla, explicación que puede ser plausible también para Gonkoken.