La Universidad de La Laguna celebró ayer miércoles, 15 de mayo, un acto con motivo de la conmemoración del Día de la Pedagogía (lunes, 13 de mayo) en el que se demandó la necesidad de cambiar el paradigma educativo actual, la adopción de un modelo de educación que ayude a enfrentar los retos en un mundo cada vez más complejo y cambiante, la aplicación de políticas que favorezcan la equidad educativa, y la reivindicación del papel de los pedagogos en todos los ámbitos de la sociedad.
Estas son algunas de las conclusiones extraídas del debate desarrollado en el Aula Magna del Campus Central, en el que autoridades de distintas instituciones y expertos en el sector −tanto en el ámbito de la educación formal como en el de la no formal− pusieron sobre la mesa los futuros desafíos a los que ha de enfrentarse el sector educativo en el siglo XXI, con especial atención al caso de Canarias.
Presidido por el rector de la ULL, Francisco García, el acto contó con la presencia del viceconsejero de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes del Gobierno de Canarias, José Manuel Cabrera; el consejero de Empleo, Educación y Juventud del Cabildo de Tenerife, Efraín Medina, la decana de la Facultad de Educación, Esperanza Ceballos y la presidenta del recién creado Colegio profesional de la Pedagogía y Psicopedagogía de Santa Cruz de Tenerife, Inés López.
En palabras del rector de la Universidad de La Laguna, en la sociedad actual, “diversa e injusta, y atravesada por múltiples problemas, es cada vez más importante la vocación transformadora de la educación”. García aludió al papel desempeñado por la Pedagogía, “aún más necesario en los tiempos que corren”, y destacó la creación del colegio profesional como una muy buena noticia, además de “un paso enriquecedor en la convivencia del mundo académico y profesional”.
En la misma línea, los consejeros regionales e insulares de Educación, José Manuel Cabrera y Efraín Medina, hicieron referencia a la “necesidad de transformar a la sociedad con la buena pedagogía, equitativa y social que se genera en las aulas y permite la igualdad de oportunidades”. Para Cabrera “es fundamental que haya unión entre el sistema educativo y universitario, y que el profesorado haga periodos de prácticas para seguir formándose”.
Tanto la decana de la Facultad de Educación, Esperanza Ceballos, como la presidenta del colegio de pedagogía provincial, Inés López, coincidieron en señalar el impacto que esta ciencia tiene en la sociedad y en las personas, y recordaron los 51 años desde la puesta en marcha de los estudios de Pedagogía en la ULL, orientados a “comprender, transformar y optimizar la práctica educativa, tanto en el ámbito formal como el informal”. Ceballos avanzó en su intervención que “la Pedagogía va a tener una actitud crítica y permanente, lejos de la complacencia y de ser servil”.
Los nuevos retos de la educación
La mesa de debate se centró en «La pedagogía en la sociedad y los nuevos retos de la educación», en la que expertos del sector público y privado aportaron sus análisis y reflexiones. El primero en hacerlo fue Manuel Area, catedrático del Área de Didáctica e Investigación Educativa de la ULL, quien reivindicó el hecho de que “sin educación no hay civilización”, para aludir a la dificultad de enseñar menos contenidos y más competencias. “Es primordial que el alumnado pueda acaparar saberes para desenvolverse en sociedad”.
Area identificó también como reto la equidad educativa de acceso a grupos sociales que parten de la marginación, para concluir con un desafío aún mayor en el que coincidieron todos: trabajar en un cambio del paradigma educativo dominante, que contempla solo la transmisión de saberes. “Aprender no es solo recibir y reproducir, sino vivir y construir el saber personal”.
La complicación estriba en llevar este modelo a la práctica, porque supone “cambiar los modos de interacción, la mentalidad docente y apostar por una pedagogía activa”, como secundó Ángela González, pedagoga del Servicio de Educación y Juventud del Cabildo, quien afirmó que en el ámbito educativo no formal “hay mucho por hacer todavía” y reivindicó la presencia de más pedagogos en las administraciones públicas para “tomar buenas decisiones”.
En contraposición, Pedro Perea, coordinador del Área de Teoría e Historia de la Educación de la ULL, alertó del riesgo que conlleva dar más protagonismo a las competencias que a los contenidos curriculares. “La Pedagogía es la ciencia de las personas y una de las pocas herramientas para superar el dato y llegar al relato, y nuestra defensa como disciplina es esa. No podemos regalar el contenido”. Como apunte importante frente a los retos, David García, gerente de la empresa Kim Educativo, destacó la importancia de establecer prioridades en el ámbito educativo, mientras Virginia Rodríguez, orientadora escolar del Gobierno canario, recalcó no perder el foco sobre “el escenario tan diverso y la necesidad de más recursos, programas y formación docente”. En este sentido, todos los ponentes coincidieron en la necesidad de no prohibir la tecnología en las aulas, sino en educar en su uso, y en el hecho de hacer autocrítica de la profesión para hacerse valer ante la sociedad.