El objetivo del trabajo ‘Violencia de pareja íntima y malestar mental, síntomas de estrés postraumático y satisfacción vital en mujeres colombianas’ determina la relevancia que la violencia de la pareja tiene en el malestar mental, los síntomas de estrés postraumático y la satisfacción vital de las mujeres. Publicado recientemente en la revista Behavioral Sciences, el artículo está firmado por la catedrática de Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos de la Universidad de La Laguna Pilar Matud, junto a la profesora Janneth E. Molina, de la Universidad Católica de Colombia.
En la publicación se analiza igualmente si la edad, la educación, el nivel socioeconómico, el apoyo social y la autoestima se asocian con la salud mental y el bienestar de las mujeres maltratadas por su pareja en Colombia. La muestra estaba formada por 255 mujeres de 18 a 71 años que fueron evaluadas mediante seis cuestionarios.
Todas las mujeres participantes en el estudio residían en alguna de las 17 localidades del Distrito Capital de Bogotá. Individuos, familias e incluso grupos enteros con diferentes características sociodemográficas llegan a Bogotá desde diferentes regiones, huyendo de la pobreza, el exilio y el desplazamiento debido a diferentes tipos de violencia: violencia sociopolítica relacionada con el conflicto armado, violencia relacionada con el narcotráfico, violencia derivada de la delincuencia común o violencia intrafamiliar.
“Los niveles de pobreza, inseguridad, profunda desigualdad e injusticia social se reproducen y refuerzan a merced de una cultura patriarcal que promueve la desigualdad de género, el sometimiento, la exclusión y la victimización de las mujeres”, relata la experta de la Universidad de La Laguna. Este es el contexto en el que se produce la violencia de la pareja contra las mujeres y se articula con otros tipos de violencia, lo que hace más compleja su comprensión y prevención, prosigue Matud, y determina que la violencia contra la mujer sea una práctica común, generalizada y reiterada en el país latinoamericano.
Los resultados encontrados evidenciaron que la violencia hacia la mujer por parte de su pareja es una práctica común en Colombia y es una amenaza a su salud mental y bienestar. Aunque había gran diversidad en la intensidad de la violencia de la pareja a la que estaban sometidas las mujeres, todas informaron de ser víctimas de violencia psicológica de su pareja. La mayoría (más del 85%) también era víctimas de violencia física y más de la mitad (el 64,5%) también de violencia sexual.
“Las mujeres que estaban sometidas a mayor violencia de su pareja, sobre todo mayor violencia psicológica, tenían peor salud mental y menor bienestar”, señala la catedrática. En cambio, “la mayor autoestima y, en menor medida, el mayor apoyo social eran factores protectores de la salud mental de las mujeres, asociándose con menor sintomatología mental y mayor bienestar”.