Skip to main content

Comienza el Nobel Forum de la ULL centrado en cooperación al desarrollo y en las políticas europeas de investigación

lunes 27 de mayo de 2013 - 08:47 GMT+0000

El Aula Magna del campus de Guajara de la Universidad de La Laguna ha sido hoy lunes 27 de mayo el escenario de apertura del Forum Nobel 2013, organizado por el centro académico dentro de las acciones previstas en su Campus de Excelencia Internacional. A él han acudido el Nobel de Medicina de 1993, Richard Roberts, y el de Física de 1979, Sheldon Lee Glashow, acompañados de un grupo de investigadores y gestores de política científica de la Unión Europea.

La idea de este encuentro es fomentar la excelencia investigadora dentro de la comunidad universitaria, al tiempo que motivar a los jóvenes en la carrera científica, no en vano esta misma tarde los dos premios Nóbel se trasladarán a las facultades de Medicina, por un lado, y de Física Matemáticas, por otro, para entrar en contacto con un pequeño grupo de doctorandos, quienes les expondrán sus desarrollos científicos y serán por tanto asesorados por estos investigadores premiados mundialmente.

Al encuentro organizado por la Universidad de La Laguna, con apoyo del Ministerio de Educación, también han acudido Álvaro de Rújula, investigador del CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear, en sus siglas en inglés); Carmen Ceinós, consultora de investigación en la UE; Josefina Enfedaque, coordinadora de comunicación del Área de Investigación Europea, de la Dirección General para la Investigación y la Innovación de la Comisión Europea; y José Ramón Arévalo, profesor de la ULPGC, miembro del Centro Internacional para la Migración, Salud y Desarrollo y director de la Fundación Excelencia, coorganizadora de este evento.

En el acto de inauguración, el rector de la Universidad de La Laguna, Eduardo Doménech, señaló que en este año 2013 se cumplen 25 años de la histórica visita a la ULL del Nobel español Severo Ochoa (abril de 1988), “luego es un orgullo para este rector y toda la comunidad universitaria que de nuevo las aulas de nuestra institución cuenten con el magisterio de alguna de las mentes más brillantes de nuestra sociedad, reconocidos por la mayor distinción que otorga en el área de la ciencia, el Premio Nobel”.

Los retos de la salud

La primera sesión del día, celebrada durante toda la mañana en el Aulario de Guajara, dedicada a la investigación para la cooperación al desarrollo, la abrió José Ramón Calvo, con la ponencia “Retos de salud en el siglo XXI. El cambio climático, ¿realidad o ficción?”. Destacó que en los retos de salud hay uno nuevo, que, aunque antiguo, ha vuelto. Se trata de la tuberculosis, que necesita respuestas inmediatas para no volver a las cifras de mortandad del pasado. También señaló el VIH, el sida, descrita como enfermedad asociada a la pobreza. Otro reto es la hepatitis vírica, causa importante de mortalidad muy ignorada tanto por el público como por los legisladores.

Existe asimismo una serie de enfermedades “para las que no estamos preparados”, dijo, como el dengue, el évola o la malaria, que han traspasado  sus fronteras. Nombro además las enfermedades relacionadas con los estilos de vida, como la obesidad o la diabetes; la inmigración, las enfermedades mentales y, además, el cambio del clima, uno de los factores que más influye en los retos ya mencionados. Alrededor 150.000 personas mueren cada año en el mundo por el calentamiento global y sus efectos derivados, según la OMS.

El experto mostró a los participantes imágenes de inundaciones y desastres naturales en La Indica, Colombia, China, Estados Unidos, Albania, Tailandia o México. El calentamiento global está contribuyendo al desarrollo de fenómenos meteorológicos extremos. Así, es muy claro observar cómo el Amazonas en Brasil se está secando, uno de los pulmones del mundo. El problema del clima lleva también al problema alimentario, que ha experimentado desde 1990 a 2011 a un incremento exorbitante del precio de los alimentos.

El empecinamiento de los negacionistas

Es habitual oír hablar de la falsa idea de la incapacidad de la ciencia para dar una respuesta al cambio climático. “Es una visión interesada de los inmovilistas”, apuntó el ponente, quienes aluden a la falta de consenso científico, cuando resulta que todas las academias de ciencias del mundo afirman el carácter antropogénico del cambio climático y donde no existe ninguna duda, aseguró Calvo.

Los negacionistas parecen estar seguros de que los investigadores están equivocados. “Los escépticos siempre tratan de apoyarse en su recurso favorito, el ridículo, aseguró el ponente. Se habla de los errores que ha tenido el IPCC (panel de expertos en clima de Naciones Unidas), que ha publicado miles de páginas por más de un millar de investigadores dando fe de la constatación de cambio climático. “Lo que sucede es que hay grupos de presión, entre los que figuran compañías petroleras o carboníferas, a las que no les interesa estos resultados”.

Qué podemos hacer, se preguntó el ponente. “Expresar nuestra opinión, unirnos a iniciativas de lucha contra el cambio climático y cambiar las pautas de consumo”.

Horizonte 2020

En la sesión de esta mañana tuvo mucho peso el debate acerca de la política científica europea y las nuevas directrices para conseguir fondos públicos de investigación. Así, Carmen Ceinós, y más tarde Josefina Enfedaque, centraron su intervención en explicar al público el futuro de Horizonte 2020, la estrategia europea de investigación de la próxima década. Estamos finalizando el séptimo  programa marco e iniciando un nuevo escenario, Horizonte 2020, que será presentado a finales de este año y cuya convocatoria se abrirá el que viene.

El total del programa comprende 1025 millones de euros, y nace de una estrategia de diez años que pretende convertir a Europa en una sociedad mucho más competitiva, sostenible e integradora, adelantó Ceinós. “Dada la situación económica del momento, esto choca bastante, pero hay que tener en cuenta que la dinámica europea arranca con unos tiempos mucho más lentos y, en cualquier caso, estos son los objetivos”.

Frente a las críticas de complejidad y variedad de convocatorias, se pretende unir todo en un solo programa, donde se va a tratar desde la investigación hasta el mercado. Bruselas quiere potenciar esta colaboración, hasta llegar a la realidad del mercado detallista. “La idea es que investigación e innovación son dos elementos que se ayudan y que deben estar en la base de todas las propuestas, que han de centrarse en los retos a los que se enfrenta la sociedad”.

El acceso a los fondos estará mucho más simplificado, añadió la ponente. “La justificación del esfuerzo y la presentación de propuestas se realizará de forma más sencilla, con el objetivo de dinamizar y facilitar el acceso al programa”. Así, habrá tres prioridades en Horizonte 2020: la excelencia científica, el liderazgo industrial y los retos sociales, con la idea siempre de acercar la investigación a la industria.[images_grid auto_slide=»no» auto_duration=»1″ cols=»three» lightbox=»no» source=»media: 12225,12226″][/images_grid]


Archivado en: Docencia, Internacionalización, Investigación, ULL, Videonoticias