El doctor en Sociología de la Universidad de La Laguna Manuel E. González Ramallal, y director de secretariado del Servicio de Deportes ha realizado un estudio bajo el título de «La imagen de los deportistas de elite en los medios de comunicación», en el que destaca, por un lado, la importancia que tienen los medios de comunicación a la hora de no sólo difundir información, sino de construir la cultura deportiva, y por otro, la escasa transmisión de valores educativos y culturales por parte de los deportistas de elite a sus aficionados.
El objeto de este trabajo es fruto de la investigación sociológica en torno a la imagen que se refleja de los deportistas de elite en los medios como referentes de la cultura y de los valores deportivos, y será publicado en breve en un libro de varios autores que se editará tras el congreso Culturas Deportivas y Valores Sociales celebrado recientemente en Barcelona.
Según el doctor, la cobertura informativa acerca del deporte que llevan a cabo los medios de comunicación ha generado una realidad deportiva orientada única y exclusivamente hacia determinados clubes y deportistas de elite, los cuales se configuran como agentes socializadores de referencia.
González Ramallal dice que no se puede olvidar la dimensión estrictamente educativa que el deporte lleva consigo, que fomenta valores como la cooperación, la sociabilidad o el éxito personal y grupal, entre otros, así como la influencia que ejerce en los jóvenes la información que se transmite de éste. Por ello resulta muy difícil separar la actividad deportiva educativa del deporte profesional o de elite.
El autor define algunas de las características de los deportistas de elite mediáticos diciendo que suelen ser «hombres, ganadores y ambiciosos», normalmente son los representantes máximos de una nación, ya sea en sus selecciones o en un club. Son a quienes se les presta más atención desde los medios de comunicación y quienes ceden su imagen y su voz casi diariamente a millones de televidentes, lectores u oyentes. Por esto, habría que revisar el papel que cumple el deportista de elite como agente socializador del hábito deportivo en un contexto informativo, ya que transmite unos valores excesivamente individualistas que no son los que el deporte debería inculcar desde un punto de vista educativo y formativo.
El docente, tras este análisis, llega a la conclusión de que el deportista de elite tal y como lo presentan los medios no ni mucho menos un ejemplo para que lo imiten, y propone como solución reorientar la línea de información deportiva de los medios para que llegue a ser un referente de una socialización deportiva fundamentada en la transmisión de valores educativos.
