El Claustro de la Universidad de La Laguna debatió hoy lunes 4 de febrero acerca del estado de la universidad, en una sesión extraordinaria celebrada en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, que estuvo precedida de la presentación ante el órgano colegiado de los presupuestos para 2013.El rector de la institución académica, Eduardo Doménech, realizó su exposición basándose en las propuestas de su plan de gobierno y centrado en los cinco valores estratégicos que orientan su acción de gobierno.
Cohesión institucional
En relación al valor de cohesión institucional, el rector repitió, como en otras ocasiones, que nadie va a venir a salvar a la universidad pública, más bien todo lo contrario. “Hemos de esperar mayor grado de control, de restricciones y sobre todo de limitación de nuestra autonomía. Los cambios normativos, los controles presupuestarios y las amenazas de intervención judicial a las que se están sometiendo a las universidades confirman que el “asalto” ya ha comenzado, y lo peor está por venir”, auguró.
Para el rector, “una universidad muy diferente a la actual está a la espera de desembarcar a través de un nuevo marco legal. Todavía no sabemos el alcance de la reforma legislativa, pero lo que sí es esperable es que la reforma se hará contra la universidad pública y asumiendo principios neoliberales”. Desde la subida de tasas junto al endurecimiento de los criterios para la concesión de becas, hasta el control normativo de las plantillas docentes, alegó el rector, “son muestras que lo que está por venir no es precisamente una buena universidad”.
Gestión
El rector señaló que se ha seguido avanzando en el desarrollo del Plan de Modernización de la Administración Universitaria en los ámbitos de la planificación, la reglamentación, la gestión administrativa, la organización de los servicios, los sistemas de información y comunicación y la evaluación.
En este punto mencionó las medidas desarrolladas para la implantación de la administración electrónica, que en un año ha conseguido desarrollar 45 procedimientos online. “En este momento nos coloca como la administración pública canaria con mayor uso de su sede electrónica, con un total de 4.114 expedientes gestionados”.
A este logro hay que añadir lo alcanzado en el ámbito del procedimiento de la automatrícula, con un incremento de un 15% respecto 2011/2012, y con la intención de dar el salto cualitativo y cuantitativo de desarrollar la totalidad de la matrícula vía online. Además se ha conseguido tener operativa la matrícula online a los estudios de Posgrado (Máster y Doctorado), así como la cumplimentación de las actas de estos estudios vía telemática.
También se refirió a la finalización del estudio de las cargas de trabajo del PAS funcionario, realizando un análisis de un total de 122 unidades entre servicios centralizados, centros y departamentos. Actualmente se está redactando el informe diagnóstico en la idea de, explicó el rector, establecer las medidas de reorganización de la plantilla para una mejora de la gestión y de los servicios.
La finalización del estudio de cargas de trabajo del PAS Funcionario y la negociación del 2º Convenio Colectivo del PAS Laboral posibilitarán a la universidad dotarse de una Relación de Puestos de Trabajo en particular, y de un marco de regulación laboral en general “que nos permita enfrentar el futuro con garantías en términos organizativos y funcionales; y estabilidad en el empleo”, así como detectar de forma objetiva las carencias de PAS y plantear su cobertura cuando cambien las circunstancias, indicó.
Financiación
El rector afirmó que este presupuesto se trata de una previsión presupuestaria sólida en su elaboración pero “muy vulnerable por la precariedad asociada a la salvaje reducción presupuestaria que hemos sufrido por parte del Gobierno de Canarias”, así como por la dependencia del sostenimiento de las matrículas como fórmula de ingreso.
En este punto, el rector apuntó la “clara intencionalidad” de ir reorientando el modelo de financiación de las universidades públicas hacia la búsqueda de ingresos complementarios. “Con ello se cuelga sobre la cabeza de las universidades una espada de Damocles presupuestaria, ya que se nos hace responsables exclusivos del riesgo del déficit de nuestro presupuesto por el descenso de los ingresos por matrícula”.
“Esperemos que el compromiso expresado públicamente a los representantes del PDI de las universidades por el consejero de Educación, de cubrir el déficit que se genere por la posible reducción de la matrícula, se haga efectivo en el caso que ello se produzca”, espetó Doménech.
Para el rector, resulta paradójico que, por un lado, el gobierno central limite el acceso a la universidad incrementando el precio de las matrículas y endureciendo las condiciones para obtener beca y, por otro, el gobierno autonómico desplace su responsabilidad hacia las universidades, “dejándolas solas ante la incertidumbre de hacer frente a las consecuencias de reducción de su financiación por las medidas antisociales que aplica el Estado”.
En su opinión, “parece que se han coordinado ambas administraciones en el interés de ‘cargarse’ a la universidad pública. Dadas las diferencias entre los partidos que sustentan ambos gobiernos, no debiera ser así, pero lo cierto es que ambas medidas están sincronizadas en contra del modelo de universidad que hasta ahora conocemos”. El máximo representante de la ULL dejó clara su posición: “Si las universidades realizamos un servicio público, la financiación debe ser pública”.
Sin embargo, la progresión de acontecimientos va en otra dirección, apostilló Doménech. La financiación de la comunidad autónoma de Canarias destinada a las dos universidades canarias es un 8,34% menos con respecto al 2012. Esta bajada para el ejercicio 2013 supone eliminar el 100% de las infraestructuras y el 5% de los gastos de funcionamiento.
En este punto, el rector hizo mención a “la salvaje reducción en la partida de infraestructuras”. Con ello no sólo peligra la continuidad de las obras en curso, fundamentalmente Bellas Artes y la segunda fase de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Informática, relató el rector, sino el presupuesto para inversiones, que se ha reducido drásticamente y que si no se corrige en próximos presupuestos, “hace peligrar el sostenimiento de nuestros edificios, sobre todo aquellos de mayor antigüedad”.
“Hasta el presente curso hemos podido mantener nuestro compromiso con la comunidad universitaria de establecer como prioridad el mantenimiento de nuestra plantilla de PDI y PAS, pero nos encontramos en una posición de delicado equilibrio en el borde del precipicio, por lo que cualquier eventualidad y nuevas reducciones en ejercicios futuros ponen en serio peligro la estabilidad de la plantilla y el adecuado funcionamiento de la institución”, anunció.
Para el rector, “es más que evidente que tenemos una administración educativa que, sea por falta de compromiso político, sea por falta de competencia en la gestión, sea por falta de coherencia ideológica, sea por lo que fuere, no apoya a la universidad pública, y los hechos así lo ratifican”, señaló.
Esta afirmación se fundamentó en lo acaecido en el trámite parlamentario de la Ley de Presupuestos de 2013, en el que los rectores presentaron a través de varios grupos parlamentarios varias enmiendas para aminorar el recorte presupuestario para las universidades, sin éxito. “Después del trabajo de interlocución resulta injustificable que por un veto personal del consejero de Educación se bloquee la posibilidad de recibir un gesto de apoyo gubernativo”.
Innovación
Dentro del valor de innovación, el rector resaltó la implantación progresiva del Docentia como instrumento de evaluación de la actividad docente, la oferta del Plan de Formación del Profesorado, atendiendo a las directrices de los Sistemas de Garantía interna de Calidad, y la progresiva implantación del Plan de Acción Tutorial en los centros.
“He dado instrucciones a la vicerrectora de Alumnado para que establezca como prioridad la consecución de un pacto entre todos los sectores de la comunidad universitaria que posibilite la mejora del rendimiento académico y el aprendizaje de nuestro alumnado”, adelantó en su discurso.
Respecto a la actividad investigadora, recalcó la gravedad del descenso de los recursos disponibles para investigación. “Se trata de la mayor reducción que nunca se ha producido desde que se puso en marcha el sistema moderno de I+D en España y los recortes sitúan ahora la financiación de la I+D en los niveles de 2005”. La última sacudida al sistema español de ciencia y tecnología ha sido no sólo la reducción del 20% de los fondos asignados al Plan Nacional, prosiguió, sino que además se decide que la gran mayoría de los 3.282 proyectos aprobados recibirán estos fondos no en tres años, sino en cuatro, vulnerando los términos de la convocatoria oficial.
“El efecto será devastador para la mayoría de los grupos de investigación y también para sus centros, los organismos públicos de investigación y universidades. Y en el ámbito autonómico este año no se tiene previsto sacar ninguna convocatoria de proyectos de investigación”.
Eduardo Doménech se congratuló de que gracias a las movilizaciones de los becarios y en general de la comunidad universitaria, y también a la sensibilidad e interlocución del director de la Agencia Canaria de Investigación, se lograra introducir una enmienda parlamentaria que restaurase las partidas asociadas al apoyo a la formación de investigadores.
“Hemos seguido buscando vías de financiación sobre todo a nivel internacional. Es el caso del proyecto Imbrain, que cuenta con una financiación de más de cuatro millones de euros hasta 2015, y pretende establecer redes de colaboración con centros europeos de excelencia y empresas”.
Y con el cada vez más precario presupuesto del área de investigación, explicó, se han mantenido las acciones del plan propio de investigación, incluyendo nuevas convocatorias como los proyectos puente al Plan Nacional y las ayudas para potenciar la actividad investigadora en Ciencias Sociales y Jurídicas y Humanidades, o la publicación de la primera convocatoria de ayudas a proyectos de iniciación o reincorporación a la actividad investigadora. “Una vez cerremos el acuerdo con la nueva entidad bancaria dispondremos de una partida relevante destinada a becas para la realización de tesis doctorales”.
Excelencia
Doménech comunicó que el Campus Atlántico Tricontinental acaba de ser evaluado positivamente en sus dos primeros años de vigencia por una comisión internacional. En esta evaluación parcial se destaca como fortaleza los esfuerzos realizados para obtener fondos externos al programa CEI (ya sin financiación desde 2011), que, desde 2010, han supuesto captar fondos en convocatorias competitivas por valor de 21,34 millones de euros”.
Las incertidumbres sobre el futuro del programa, la ausencia de convocatorias de financiación y las duras condiciones económicas impuestas a las universidades destinatarias por medio de fondos reembolsables ha sido para las dos universidades canarias un escenario poco propicio para desarrollar el proyecto, relató el rector.
El desarrollo de un sistema de gobernanza que dé proyección y continuidad a la agregación es uno de los hitos que se deben conseguir en este 2013, una vez que se han alineado estructuras propias de las universidades, se han establecido mecanismos de coordinación y se inicia un nuevo periodo de explotación de las inversiones iniciales hechas en materia de infraestructuras y capital humano.
