Un equipo de investigación de la Facultad de Economía, Empresa y Turismo de la Universidad de La Laguna compuesto por Domingo J. Lorenzo Díaz, Encarnación Esparza Ferrera (Departamento de Economía Aplicada y Métodos Cuantitativos), Eugenio Díaz Fariña (Escuela Universitaria de Turismo de Santa Cruz de Tenerife) y Juan José Díaz Hernández (Departamento de Economía, Contabilidad y Finanzas) ha presentado en la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife el estudio elaborado bajo el título “El PIB de Canarias y sus economías insulares. Reflexiones sobre su cálculo y aproximaciones al impacto de la COVID-19”.
Dicha investigación pone de manifiesto que, sin menoscabo de la importancia que tienen la dimensión social y medioambiental asociada al proceso de crecimiento económico, la correcta contabilización de la actividad productiva es un requisito básico en la gestión eficiente de los recursos, para guiar la toma óptima de decisiones de política económica. El mencionado estudio destaca que lejos de ser un mero ejercicio contable, la correcta medición del PIB puede acarrear serias consecuencias para la economía y el bienestar de una sociedad. En primer lugar, se aclara que en la contabilización del PIB deben sumarse la cuantía de impuestos netos a los productos, una cifra que la Contabilidad Regional de España (CRE) reparte entre las diferentes comunidades autónomas de manera proporcional al peso de cada una sobre el Valor Añadido Bruto nacional.
Sin embargo, se destaca que el Sistema Europeo de Cuentas admite la posibilidad de utilizar otros métodos de asignación de esta partida para aquellos territorios que tengan sistemas fiscales específicos. Esta posibilidad reconocida por las instituciones europeas y que Francia aprovecha para sus territorios de ultramar, podría ser igualmente aplicable a Canarias, dada la vigencia de un sistema fiscal diferenciado del nacional. Siguiendo esta posibilidad, el mencionado estudio evalúa que la cuantía de impuestos netos sobre los productos efectivamente soportada en Canarias sería 1.835 millones de euros inferior a la inicialmente estimada la CRE.
Este resultado, lejos de ser un mero ajuste contable, tiene importantes implicaciones para la economía canaria, explican los investigadores. En primer lugar, esto supondría que el PIB canario de 2018 descendió hasta los 43.988 millones de euros frente a la cifra oficial de 45.823 millones de euros. Esta reducción a la baja del PIB de Canarias daría lugar a efectos inmediatos en dos de los principales indicadores macroeconómicos: el PIB per cápita y el nivel de endeudamiento público.
En particular, el menor PIB canario supondría una reducción del PIB por habitante que, una vez extrapolada al periodo 2011-2013, habría provocado que Canarias presentase un PIB por habitante que era el 76,4% de la media europea a representar, tras la reestimación propuesta en este trabajo, el 74,6% de dicha media. De esta manera, Canarias, en lugar de haber sido calificada por la Unión Europea como una “región en transición” habría sido considerada como una “región menos favorecida” al tener un PIB per cápita inferior al 75% de la media europea.
Este punto se vuelve crucial debido a que el reparto de los fondos estructurales y de inversión de la Unión Europea depende en gran medida de la consideración que recibe cada región. Así, el estudio de la Universidad de La Laguna ha estimado que durante el periodo 2014-2020 Canarias podría haber obtenido 840 millones de euros adicionales de los fondos del Fondo Europeo de Desarrollo Regional y del Fondo Social Europeo si se le hubiese considerado como “región menos favorecida”.
Por otro lado, la disminución propuesta en el PIB canario provocaría un incremento en la ratio de deuda pública respecto al PIB regional, pasando en el año 2018 del 14,8% al 15,4%, una modificación que continuaría dejando a Canarias como una de las regiones españolas menos endeudadas, manteniendo inalterado las posiciones relativas en el ranking del endeudamiento público. En resumen, el presente estudio pone de manifiesto que la rebaja en la estimación del PIB acogiéndose a una opción reconocida por las autoridades europeas permitirá captar un mayor volumen de fondos europeos, sin afectar de manera significativa la ratio de endeudamiento de Canarias.