Recientemente la Comisión Europea ha aprobado el proyecto ARSINOE: Construyendo un futuro con bajas emisiones de carbono y resiliente al clima: investigación e innovación en apoyo del Pacto Verde Europeo. La propuesta está compuesta por un consorcio de 42 instituciones, con 15 países implicados. El proyecto, enmarcado en la convocatoria H2020 EU Green Deal, acaba de comenzar y tiene una duración total de 48 meses. La Universidad de La Laguna forma parte del citado consorcio, que ha conseguido en esta convocatoria uno de los mayores presupuestos destinados a este tipo de proyectos, quince millones y medio de euros.
Así, este centro académico coordinará las actividades vinculadas a los sistemas insulares, su vulnerabilidad y resiliencia al cambio climático, en particular de sus recursos hídricos. Su investigador principal es el profesor Juan Carlos Santamarta, de la Sección de Ingeniería Agraria de la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería, que ya ha coordinado anteriormente proyectos internacionales y nacionales similares, vinculados a la huella de carbono y transición ecológica en las Islas Baleares, Canarias y en las infraestructuras portuarias europeas.
El proyecto tiene el objetivo general de establecer el camino para una transformación fundamental de las economías y sociedades en Europa, y responde a la necesidad urgente de hacer frente a la crisis climática y proporcionar una mayor protección del medio ambiente y la biodiversidad únicos del continente y de los sistemas insulares como el archipiélago canario. Al mismo tiempo, esta iniciativa aborda el reto igualmente urgente de ayudar a la recuperación tras la crisis de la Covid-19, contribuyendo directamente al Plan de Recuperación para Europa.
También se utilizará la investigación y la innovación para poner en marcha las transformaciones medioambientales, sociales y económicas necesarias aumentar la resistencia y capacidad de respuesta a estas nuevas amenazas en el futuro. El enfoque de ARSINOE se muestra en regiones muy variadas, como las Islas Canarias, como prueba de concepto con respecto a su aplicabilidad, replicabilidad, potencial y eficacia.
La ciencia y el conocimiento son la brújula para trazar el camino hacia economías, sociedades y sistemas de gobernanza más resistentes y los sistemas de gobernanza, y para diseñar una nueva estrategia de crecimiento ecológico para el crecimiento verde para la UE, que adopte la digitalización y mejore la competitividad de Europa. Existe más información sobre el proyecto disponible en este enlace.