El Paraninfo de la Universidad de La Laguna se ha llenado hoy, viernes 27 de octubre, con más de doscientas personas en representación de diferentes empresas, organizaciones profesionales e instituciones públicas que comparten algo en común: colaboran, de un modo u otro, con la institución académica y, por ello, ésta ha querido agasajarlas mediante este acto durante el cual se ha desarrollado una sesión de networking, se ha presentado el nuevo Observatorio de Formación y Empleo del centro académico y también sirvió como escenario para una inspiradora charla sobre gestión del cambio institucional a cargo del consultor Juan Ferrer.
El rector de la institución, Francisco García Rodríguez, y la vicerrectora de Estudiantes, María del Rosario Hernández Borges, dieron la bienvenida a la audiencia, destacando el excelente clima de colaboración existente entre el tejido productivo canario y la Universidad de La Laguna. Obviamente, la vertiente más notoria de esa cooperación está conformada por las prácticas obligatorias que el alumnado realiza cada año gracias a los casi 2.000 convenios de colaboración firmados con entidades públicas y privadas que acogen a esos miles de estudiantes.
Pero las prácticas nos son las únicas posibilidades de colaboración posibles: el rector recordó la cada vez más nutrida nómina de cátedras institucionales y de empresas, que favorecen una relación más estrecha entre las entidades externas y la academia y se sustancia en actividades tanto de formación como de investigación. García también explicó que en estos momentos se está en un proceso de escucha a las entidades sociales para adaptar su formación a las necesidades del tejido productivo, no sólo diseñado nuevos títulos, sino introduciendo nuevas metodologías como las microcredenciales, que facilitan una formación más especializada y modular.
Javier Ramírez, del Observatorio.
Observatorio de Formación y Empleo
Javier Ramírez, coordinador de la Unidad de Análisis y Difusión de Resultados de la Fundación General de la Universidad de La Laguna, presentó el Observatorio de Formación y Empleo del centro, explicando que, si bien esa actividad de análisis de la empleabilidad universitaria lleva desarrollándose desde hace quince años, ahora se ha decidido darle más impulso y visibilidad mediante este nuevo portal web, en el cual ya hay disponibles varios estudios e investigaciones sobre la inserción laboral del alumnado egresado que puede servir de utilidad para los agentes sociales.
El analista explicó que, en la actualidad, el observatorio mantiene once líneas de trabajo, si bien quiso destacar cuatro en concreto: la elaboración de informes de inserción laboral y empleabilidad mediante el cruce de datos provenientes tanto de entidades como el Instituto Canario de Empleo y el Instituto Canario de Estadística como de encuestas realizadas ex profeso; la detección de necesidades del tejido empresarial; el asesoramiento y colaboración para la mejora de la formación mediante acciones como el programa Capacita; y la participación en la Red de Observatorios Universitarios de Empleo de la CRUE, en la cual participan 76 universidades, 40 de ellas de forma permanente.
Ramírez aportó algunos datos provisionales de los estudios que están en curso dentro del observatorio. Así, señaló que los empleadores valoran que los trabajadores egresados de la universidad muestran valores como la preocupación por la calidad, la adaptación a los cambios, el trabajo en equipo y la responsabilidad. Por el contrario, habría oportunidades de mejora en ámbitos como la motivación para el trabajo, el trabajo autónomo y las competencias tanto digitales como de comunicación oral y escrita.
Gestionar el cambio
Juan Ferrer, experto en gestión del cambio
El acto se acompañó de una conferencia dictada por el consultor Juan Ferrer, dedicada a explicar el proceso de gestión del cambio evitando resistencias. Ferrer es experto en gestión del cambio en empresas y administraciones públicas, tanto de procesos de digitalización como de transformación cultural o rediseño organizacional. Ante todo, el ponente indicó que el “cambio es una negociación personal”, que se consigue cuando no se trata de una imposición, sino de un proceso participativo, fruto del liderazgo colectivo, la metodología y la estrategia para lograrlo.
Y sostuvo que liderar es precisamente eso: “Un líder es un impulsor del cambio”, y cuando este no se produce lo que hay es simplemente gestión. El experto consideró que el promotor de esa evolución ha de ponerse detrás, y que sea el equipo de trabajo el que lidere el movimiento. “Se es líder cuando se crean otros líderes”, agregó.
Ferrer sostuvo que la inercia diaria y la rutina nos impide a veces mejorar, y por ello se preguntó si la ineficiencia es un problema individual o del modelo organizacional, para optar como respuesta por lo segundo. “Es el sistema el que condiciona al individuo”. Por eso consideró que el éxito es fruto del talento, de la capacidad de ser líder de uno mismo y del propio ecosistema, que ha de favorecerlo. “El talento solo se mueve si se pone en marcha”.
