El pasado fin de semana fue vandalizada la patera que, en memoria a las víctimas de la ruta migratoria canaria, fue colocada en el Campus de Guajara el pasado 25 de mayo, Día de África. Hoy, lunes 19 de febrero, el rector de la Universidad de La Laguna, Francisco García, y el director de Centro de Estudios Africanos, Víctor Martín, visitaron los restos del incendio y manifestaron su repulsa por lo sucedido. “Toca reivindicar a la mayoría silenciosa frente a esta minoría que hace ruidos y genera disonancia. Tenemos que alzar la voz quienes habitualmente estamos en silencio, que somos la inmensa mayoría. Que esto sirva de muro de contención ante quienes son minoría, pero quieren armar mucho ruido”, señaló el rector.
García informó de que el incendio se produjo alrededor de las 20:45 horas del viernes, cuando el Servicio de Seguridad alertó de la emergencia y contactó con la policía y los bomberos. Ya hay una investigación abierta, cuyos detalles no reveló por discreción, si bien manifestó su deseo por que se esclarezcan los hechos y “los responsables de este acto vandálico sean sometidos al imperio de la ley”.
También recordó el valor del enclave como recuerdo a las víctimas de la “mortífera” ruta canaria en busca de un futuro mejor, del cual “se ven privadas en sus lugares de origen por las injusticias del sistema socioeconómico del planeta”. El monumento es reflejo de los valores universitarios, que “entroncan con la paz, la justica y la tolerancia”, y ahora sus restos serán un símbolo contra la sinrazón.
Por todo ello, el rector reflexionó que la sociedad canaria, y la comunidad universitaria en particular, es tolerante, y prueba de ello es que nunca se había dado en sus campus un acto vandálico de esta magnitud. Fue en ese momento cuando reivindicó la silenciosa y tolerante mayoría universitaria que, ahora, más que nunca, debe hacerse notar más que la minoría que busca perturbar la convivencia.
Por su parte, el director del Centro de Estudios Africanos denunció que lo sucedido es un ataque a la propia universidad, “que en sus estatutos recalca el respeto a los derechos humanos y la lucha contra la injusticia”. Recordó el propósito del memorial en homenaje “a las víctimas que todos los años fallecen en la ruta de migraciones canarias, que se cuentan por miles: solo el año pasado murieron más personas que en los atentados de la Torres Gemelas”.
La patera fue colocada con orientación sur, invitando a tender su mirada hacia aquel lugar. “A la simbología que ya tenía este memorial ahora se le añade otro sentido: la lucha contra la intolerancia y contra este tipo de acciones. Hoy nos manifestamos para darle la vuelta. Y si el año pasado hubo 300 personas en la inauguración, ojalá el próximo 25 de mayo seamos 600 o mil personas, porque somos la mayoría. Ellos son la minoría y no tienen cabida en una institución como esta”.