El Consejo de la Unión Europea centra su confianza en el sector turístico como motor generador de cambios en el continente, en la medida en que permite ayudar a conseguir un alto nivel de empleo y bienestar social, un crecimiento sostenible, una mejor calidad de vida y una mejor integración europea, así como una mayor cohesión económica y social, y favorecer así considerablemente la consecución de los objetivos de la convergencia. Por lo tanto el desarrollo de la actividad turística se encuentra íntimamente relacionado con el crecimiento económico y social de un determinado espacio geográfico. Teniendo en cuenta que España es el segundo destino turístico de Europa resulta fundamental potenciar en nuestro país el estudio y análisis de la tendencia de la actividad turística con el fin de garantizar su desarrollo sostenible. Por otro lado, no se puede negar que la actividad turística está fundamentalmente asociada a la disponibilidad de agua de una determinada área geográfica. En España se da la circunstancia de que las zonas más demandadas a nivel turístico coinciden con las de mayores problemas en el ámbito hidrológico. Esta situación de estrés hídrico hace que en muchas zonas turísticas, en su mayoría costeras, existan verdaderos problemas de cantidad y calidad en los suministros de agua. Entre estos ejemplos de espacios geográficos de escasez de agua y grandes demandas turísticas se encuentra el caso de Canarias. Concretamente el sector turístico de Canarias se sitúa en tercer lugar por número de turistas extranjeros recibidos en el ámbito del mercado turístico español que, según datos de la Organización Mundial del Turismo (2013), constituye el segundo destino europeo, por detrás de Francia, absorbiendo más del 10% de turistas internacionales que visitan Europa. Entre las características distintivas de Canarias, como destino turístico, ha de destacarse la ausencia de estacionalidad debido a que posee un clima suave durante todo el año, lo que ha hecho que no haya parado de crecer en número de turistas desde los años 60, aunque con distintos momentos de aceleración y desaceleración. Si bien la actividad turística de una determinada región como Canarias proporciona indudables beneficios socioeconómicos, no es menos cierto que dicha actividad ha de contrapesarse con elementos que limiten insostenibilidades a medio y largo plazo. Siguiendo esta reflexión es interesante plantearse si una adecuada gestión del agua en estos entornos, podría tener consecuencias positivas para la cuenta de resultados de las actividades económicas relacionadas con el ámbito turístico, bien por ahorro de costes o bien porque la imagen asociada podría afectar al nivel y características de su demanda. O por otro lado, si una gestión eficiente de las actividades turísticas podría repercutir positivamente en una mayor disponibilidad de agua, en entornos, en los que, como Canarias, este recurso se caracteriza especialmente por su escasez. En este contexto, en el presente proyecto trataremos de dar respuestas a dichos interrogantes, analizando los posibles impactos que puede generar una estrategia de mejora de la eficiencia en la gestión del agua en el sector turístico y al contrario, es decir hasta qué punto una estrategia apoyada en la sostenibilidad hidrológica en el ámbito turístico podría repercutir en la disponibilidad de agua, tanto en lo que a cantidad como a calidad del recurso se refiere. Es fundamental tener en cuenta que el análisis del sector turístico en Canarias resulta especialmente complejo debido a su fragmentación en siete espacios insulares de características muy diferenciadas, lo que genera una enorme variedad de microdestinos con circunstancias y, por lo tanto, problemáticas diferentes, es por ello que se ha decidido centrar el estudio en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, y concretamente en la isla de Tenerife. Por lo tanto, los objetivos planteados con el desarrollo de este proyecto son: 1. Analizar la gestión actual del agua en las actividades relacionadas con el ámbito turístico, tanto en su dimensión social, como ambiental y económica 2. Plantear una estrategia de actuación futura centrada en la innovación ecológica como única opción de garantizar el crecimiento sostenible de este sector. 3. Proponer indicadores de medidas que permitan evaluar las acciones desarrolladas según la planificación propuesta. Para la consecución de estos objetivos se plantean cuatro fases en la ejecución de este proyecto: – 1ª Fase: Diagnóstico del consumo y la gestión del agua en el ámbito turístico. Se trata de, a través fundamentalmente de fuentes primarias y realización de encuestas, hacer un diagnóstico del consumo que se hace del agua en isla de Tenerife. Esta primera fase es la más compleja puesto que no es fácil encontrar estadísticas regionales relacionadas con el consumo de agua asociada al sector turístico. Analizando el caso español, concretamente, se observa como la estimación del consumo de agua no distingue entre residentes permanentes, turistas o actividades comerciales e industriales y turísticas sino que diferencia, únicamente entre el consumo de hogares y sectores económicos, principalmente. Para la ejecución de esta fase de prevé un tiempo de desarrollo de 8 meses. – 2ª Fase: Análisis del impacto medioambiental, social y económico de las actuaciones identificadas en la fase anterior. En este caso nos apoyaremos en estudios de análisis de impactos aplicados a otros ámbitos con el fin de diseñar y desarrollar una herramienta específica para el sector turístico. Nuestro objetivo es proponer un cuadro de mando que permita de un “sólo vistazo”, analizar las implicaciones del consumo y gestión del agua en lo que al ámbito turístico se refiere. Para la ejecución de esta fase se prevé un total de 6 meses. – 3ª Fase: Diseño y desarrollo de una propuesta de actuación en lo que a gestión del agua se refiere, especialmente centrados en el ámbito turístico. Con esta fase se pretende hacer un análisis de buenas prácticas desarrolladas en otros sectores y/o en otros lugares geográficos con el fin de completar una propuesta estratégica que permita disponer de un marco de actuación en lo que al ámbito turístico se refiere. El tiempo estimado para el desarrollo de esta fase es de 4 meses. – 4ª Fase: Recopilación y difusión de resultados. En esta última fase se elaborará un manual completo que recoja los principales aspectos relacionados con la ejecución de este proyecto. Además se estima redactar, al menos, cuatro artículos científicos, susceptibles de ser publicados en revistas de impacto, con los que se añada valor científico en este ámbito de especialización. Por otro lado, se pretenden exponer los principales resultados obtenidos de la realización de este proyecto en cuatro congresos científicos. Para el desarrollo de esta última fase se estima invertir 4 meses. Al tiempo que se estima ocupará cada una de las fases de investigación se deben añadir 2 meses de diseño específico de la investigación y de la herramienta de obtención de datos. Somos conscientes de que se trata de un proyecto ambicioso, debido a la escasa investigación desarrollada en torno al agua, como recurso social, medioambiental y económico, centrado específicamente en el ámbito turístico, sin embargo estamos convencidos de la necesidad de destinar esfuerzos a este ámbito con el fin de garantizar el desarrollo sostenible un espacio insular caracterizado por la escasez de agua como es la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Los resultados de este estudio se podrán extrapolar a otras regiones de problemática similares.